Cielo Razzo presenta “El Día Fuera Del Tiempo”, su 8° disco de estudio y el primero tras 9 años. Dialogamos con Pablo Pino sobre este álbum reflexivo y profundo que los encuentra luego de 30 años de trayectoria.

  • Reportaje y texto: Julián Retamozo

Tras 30 años de carrera, Cielo Razzo presenta “El Día Fuera Del Tiempo «, su octavo álbum de estudio. El disco interpela a la conciencia dormida, es la potencia que habita en un abrazo, en un beso, en una herida. Busca pensar y sentir las ideas para no hacer de las causas consecuencias irremediables.

En 8 canciones cuidadosamente trabajadas por la banda rosarina, E.D.F.T. constituye un viaje en la parte de atrás, la reina fuera de la colmena, un alma que mira, la voz que te llama para que vuelvas. Es solidaridad, va con el corazón en la mano,es el libro fuera del aula, la belleza deshabitada. En agosto del 2023, fue el lanzamiento del primer corte «Corazón» estrenado en el Luna Park y en diciembre salió el segundo adelanto «Colmena», presentado en vivo en el show con el que cerró el año, en el Teatro Flores de Capital Federal.

Charlamos con Pablo Pino, vocalista de Cielo, sobre la génesis de este disco que marca su regreso a los estudios de grabación luego de 9 años de ausencia.

¿De donde surge el concepto de “El día fuera del tiempo”?

PP: En realidad el concepto cae después del nombre. Nosotros estábamos reunidos el 25 de julio del año pasado para ver cómo se iba a llamar el disco y Nano lo único que dijo fue “Hoy es el día fuera del tiempo”. Y la verdad es que quedamos impactados por el nombre y por la situación. Después, analizándolo, como que super encaja en un punto. Creo que lo dijo Diego en algún momento, cuando estamos en los shows principalmente, siempre se intenta generar un momento especial por fuera de todo. Y se terminó convirtiendo en un día. Había muchas ideas dando vueltas, pero nunca terminaban de cerrar. Todo el concepto y todo lo que significa ese “día fuera del tiempo” nos pareció que estaba buenísimo.

Son canciones más bien reflexivas, va más por ese lado…

PP: Claro, sí. Por eso mismo me parece que está muy bueno el nombre que bajó porque es real. El disco es muy reflexivo, creo que tiene un tiene esa cuota de reflexión. En primera instancia, gran parte de las canciones son de Diego y él está muy enfocado.  Él siempre que escribe dirige un poco la situación. Nosotros estamos por supuesto rondándolo. A mí particularmente me parece que es un disco súper reflexivo, te lleva a repensar, poner un poco en carpeta algunas cosas que normalmente uno deja de lado.

La banda rosarina tuvo un 2023 que los encontró girando por distintos puntos de Argentina celebrando sus 30 años de existencia, con un histórico show en el mítico Luna Park en el mes de septiembre, donde tocó por tercera vez en su carrera. Además se presentó en Rosario, Santa Fe, Córdoba, Río Cuarto, Paraná, San Francisco, Monte Grande, Puerto General San Martín, Mar del Plata, Villa Gesell, Monte Hermoso, Mar de Ajó, Corrientes y el festival Rock en Baradero.

Y eso digo que también ya los agarra con 30 años de carrera. Ya habiendo pasado por múltiples grabaciones, discos en vivo, show grandes… ¿En lo artístico, en qué momento los agarra este “día fuera de tiempo”?

PP: No sé si hay un horizonte artístico, pero vamos a buscarlo y se va generando. Ya somos tipos de hace mucho tiempo que tocamos, entonces cuando lo repensás y mirás un poco para atrás poniendo en la balanza los discos anteriores (el último disco salió hace 9 años atrás), estamos todos en distintas etapas de nuestras vidas. Hay muchas cuestiones personales dentro de la banda que hacen un poco a nuestra a nuestra simbiosis, nuestro enroque. Estamos en un momento nuevo siempre, algunos más livianos que otros. Este disco nos encuentra principalmente adultos y esperemos ser adultos saludables (risas). Estamos muy contentos con el disco. Hacía tiempo que no sacamos un disco, pero este disco nos representa un montón. Eso es lo que estamos hablando mucho con la banda, a cada uno lo interpela desde distintos lugares.

El último disco de estudio de fue en el 2015, (si bien han sacado material luego de la pandemia) ¿Cómo fue el volver a entrar a un estudio de grabación para encarar un disco? 

PP: Fue una entrada distinta. Nosotros normalmente siempre ensayamos todas las canciones que vamos a grabar y después se van repartiendo los días donde cada uno tiene que grabar. En esta en esta oportunidad las canciones estaban, pero sin terminar y faltaba trabajar un montón de cosas desde la letra, la melodía hasta la estructura. Porque una vez que se graba la base ya está, pero bueno, faltaba mucha letra y faltaba contemplar algunos arreglos melódicos. No tenemos un estudio propio, entonces cuando lo hacemos grabamos demos, lo escuchamos y después nos metemos a grabar directamente. En esta oportunidad fue como mucha ida y vuelta, como en mi caso. Yo grabé muchas tomas en letra y de melodía que después escuchamos con el Pájaro y él decía “Bueno, esto sí, esto no” y lo sacamos. Y en ese proceso aparecía otra melodía nueva o recortamos alguna alguna estructura melódica. Tuve también la posibilidad de escribir un poco y acompañar esa narrativa. Todo esto fue muy loco, en algún momento dije que costó mucho porque lo teníamos ahí, pero faltaba sacarlo. Faltaba traer a este náufrago a la orilla. Se estiró mucho y fueron mucho más días de lo de lo normal. 

Bueno, eso se ve reflejado también en el sonido: hay un laburo más cuidado de producción…

PP: Sí, sí porque en Cielo yo no soy para nada cuidadoso (es un defecto que tengo) pero principalmente Javi, que es el productor, y Pájaro ellos se pusieron el proyecto al hombro. Yo sabía que hasta que no pasaba por Javi o por Pájaro, la cosa no estaba definida. La cuestión del sonido la manejaron ellos dos, tienen esa virtud y el resto tenemos que prestarle mucha atención a eso.

Estuvieron presentando estas canciones en vivo antes de que saliera el disco, ¿cómo fue la respuesta de la gente al escuchar lo nuevo de Cielo?

PP: Eso siempre es un interrogante. En este caso, la verdad que fue increíble la respuesta que tuvo, fue una reacción inmediata de que gustó. Nos ha pasado con otro disco que no sea así, que sea muy resistido (como en el caso de “Compost”). En esta oportunidad fue súper aceptado. Las canciones recién son escuchadas, o sea, recién están en este proceso de digestión. Ya el primer bocado a mí me encanta, lo sigo escuchando. Cada tanto me lo pongo y lo escucho completo porque me que es muy bonito, muy amable. Es un disco también muy corto, pero es muy dinámico, tiene muchos colores. Yo tengo la sensación de que gustó de verdad.

La sensación que me pasa al escucharlo es que es un disco que pasa rápido y deja con ganas de más…

PP: Sí, sí, también tengo esa sensación. Pero también a la vez cierra perfecto: es el disco número 8, son 8 canciones. Nosotros trabajamos en esto, con música. Trabajamos con la magia. Yo voy supersticioso también y cuando nos dimos cuenta de esos detalles dijimos “No, pará. Es alucinante, el disco se cierra acá”.

Cielo Razzo se formó en la ciudad de Rosario en 1993, y con 30 años de trayectoria ha recorrido todo el país, presentándose en los escenarios más importantes de la música nacional y en los festivales de mayor trascendencia en reiteradas ocasiones (Cosquin Rock, Rock en Baradero, Pepsi Music, Quilmes Rock, etc) cosechando un gran número de seguidores que los llevó a tocar en lugares como Obras Sanitarias y el Luna Park. Los dos discos en vivo de la banda, fueron registrados en presentaciones en dichos estadios «Audiografía» (2006) y «Cielo Vivo» (2018).

En 30 años de carrera pasaron por Obras, el Luna Park, el Cosquín Rock, Rock en Baradero… O sea, todos los grandes festivales que puedan haber acá en Argentina. ¿Cuál es el show que te quedó más grabado y por qué?

PP: El primero que se grabó fue “Audiografía”. Tengo muy pocos recuerdos de los nervios de ese show. Después con el del Luna el recuerdo que tengo es básicamente lo que se ve en las imágenes. O sea recuerdo ese tipo de cosas, pero no sé si hay uno que haya quedado. Si me das a elegir, yo me quedo con el Luna del 2018. Era una etapa muy especial, siempre caótica como es Cielo, pero bueno… Quizás porque era más cercana que el de Obras. Yo lo veo cada tanto y te va tirando cosas viejas…  ¡Amigo fue hace un montón de tiempo eso! (risas) La juventud que había, todo el camino que nos estaba esperando… Es impactante.

¿Que es lo próximo que se viene para Cielo?

PP: Lo próximo que se viene son los festivales en septiembre y en octubre allá en Capital y acá en Rosario. Y después, la presentación en Complejo C Art Media en noviembre. Estamos trabajando con una productora de Rosario y estamos muy contentos con la gente de Asfalto. Ellos están preparando la gira a partir de noviembre. Ahí ya se dispara la gira, pero bueno, no sabemos dónde nos va a llevar este disco. Lo que sí sé es que cada disco es un bondi que te tomás y que no sabés a dónde va. Asíque a esperarlo con ansiedad.

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