Blues Motel encara su primer disco en vivo tras 35 años de carrera. Para ello se presentarán durante 3 noches en el Centro Cultural Richards. Entrevistamos a Gaba Díaz sobre este hito en la historia de la banda, el regreso de Adrián Herrera y sus próximos shows.

  • Reportaje y texto: Julián Retamozo

Luego de 35 años recorriendo escenarios de todo el país y 13 discos de estudio, Blues Motel saldará uno de sus pendientes en su carrera: grabar un disco en vivo. Durante 3 noches totalmente agotadas (28 y 30 de agosto y el 4 de septiembre), la banda de culto de zona norte revisitará sus canciones para darle vida a este registro en vivo junto a su público.

Dialogamos con Gaba Díaz, frontman de la banda, sobre este paso en la carrera de Blues Motel, su público y cómo fueron construyendo ese sonido tan característico a lo largo del tiempo.

¿Qué los motivó a encarar este proyecto de grabar un disco en vivo?

GD: Fueron dos cosas. En el 2024 hicimos un gran festejo por los 35 años, fue un gran año, y medio que en 2025 nos quedamos sin ideas y dijimos «Che, retomemos la idea original de grabar un disco en vivo.» Si bien nosotros siempre le escapamos al hecho de grabar algo en vivo y tener que después sobregrabar cosas porque o no están bien de sonido o no están bien tocadas. Hicimos algo en Del Cielito Records, creo que fue en el año 2012, y fue como estaba pautado para tocar en vivo: dos tomas de cada tema, lo que se tome de micrófonos a la consola, una vez mezclado ya después no se retocaba más. Nos pusimos algunas consignas para que se parezca algo una grabación en vivo, pero bueno, fue en un estudio sin público. Asíque nos debíamos esto de entrar en un escenario, en un lugar lindo, que tenga buenos buena acústica y tocar en vivo con con público. Asíque bueno, estamos en eso.

Algo característico de Blues Motel es la gente que los sigue. Ustedes sacaron dos fechas, las dos fechas están agotadas y tuvieron que sacar una más. ¿Qué palabra tenés para la gente que lo viene siguiendo hace tanto tiempo?

GD: Y la verdad es que gracias a ese vínculo, a ese cariño que nos muestran constantemente, nosotros podemos seguir. De eso no hay duda. Nos da la pauta de que todavía podemos hacer cosas, que hay un grupo de gente que les interesa y se sienten representados, ya sea por lo musical, las letras o por la estética de la banda, lo que comunicamos o por cómo somos. De más está decir que a nosotros nos encanta estar en banda, con amigos. Lo haríamos de todas formas, pero no es lo mismo. Teniendo ya un público que te banca es diferente. Digo, lo haríamos de todas formas como se puede juntar un grupo de de amigos a jugar al fútbol todos los martes. Nosotros, de alguna manera, sacándole el profesionalismo de lado y que nos encanta la música, también lo vemos. La unión de la banda con esa dinámica, la pasamos bárbara nosotros. Ensayamos una vez o dos veces por semana, vamos a los shows y lo pasamos bien. Nos juntamos en casas para hacer reuniones familiares y la pasamos bien. Y sumale el extra, que es lo más importante, que tenemos todavía un grupo de público que nos quiere o se siente identificado y nos siguen pidiendo cosas nuevas. Y eso está buenísimo, no podemos pedir mucho más.

Este show va a tener agregado una muestra fotográfica y un happening. ¿Cómo fueron pensados esos detalles?

GD: Bueno, ahí está Gaby Landa, que es parte del equipo de Blue Motel. Es el que lleva adelante la comunicación por las redes sociales, el que hace las gráficas, los flyers y diseña a veces (para algunos shows eventuales) este tipo de muestras o coordina el merchandising que se va a vender, o el happening, lo que sea. Nosotros tenemos la confianza como para saber que va a estar buenísimo. Nos fue mostrando algunos diseños. Ya se hizo una muestra de fotos y objetos ahí en ese mismo lugar y salió buenísimo. Esperamos el momento también para sorprendernos. Sabemos que sí va a haber ventas de remeras con diseños nuevos y todo eso. Todo lo que está agregando y craneando Gaby Landa. No lo sabemos, así que nos vamos a enterar ahí.

Para la locación de los 35 años, le habíamos hecho una nota a Adrián y nos faltaba la otra pata que eras vos. Él nos contó un poquito acerca de ese primer show en el Anfiteatro de Tigre. De ese primer show para acá, ¿con qué momento te quedás de la banda? Bueno, malo o algo que te haya marcado ¿Qué te dejó Blues Motel a vos personalmente?

GD: ¡Qué difícil! Porque pasó mucho tiempo, y debido a que tengo poca memoria, siempre lo resumo todo en un lapso de tiempo irreal, pero corto. Es como que para mí pasó todo en 5 años, ¿viste? Es difícil recordar algún evento. Sí, recuerdo, obviamente el encuentro con Mick Jagger. Eso no hay duda que fue uno de los momentos más emotivos o que más nos flasheó. Y bueno, después las giras en los primeros años. Giras de todo un mes a Gessel durante, no sé, tres, cuatro años seguidos. Eso también es un mojón muy importante para el crecimiento de la banda y por cómo la pasamos nosotros tan bien. Y después recuerdo el último disco. Es un símbolo, es lo nuevo que está haciendo la banda y que se mantiene fresca con proyectos, con ideas nuevas y sigue generando ideas artísticas, más allá de que siempre recurrimos a festejar discos ya editados o viejos. Los primeros discos son los más queridos, más allá de eso nosotros siempre tratamos de empujar con cosas nuevas. Después bueno, hay que ver obviamente si estamos a la altura de esas primeras composiciones. También pensando en función de lo que dice la gente. Para mí obviamente que todo lo que componemos ahora es mucho mejor de lo que componíamos cuando éramos chicos, pero es cierto que en esa etapa de frescura adolescente te salen cosas para el rock que son ineludibles.

Una pregunta que nosotros siempre hacemos a las bandas es cómo van construyendo su sonido, entendiendo que cada artista tiene un sonido propio, una forma particular de de tocar y de sonar. En el caso de Blue Motel, para muchos (incluyéndome), son referentes en el género, en el subgénero del rock. ¿Ustedes cómo viven eso?

GD: Siempre tratamos de darle una vueltita, ya sea en las letras, algún giro poético o que cuenten algo más allá de lo que puede contar una banda clásica de rock. Sin hacernos los intelectuales, pero que tenga algún algún contenido extra más allá de lo que es la calle del rock and roll. También es cierto que la realidad nuestra es la banda, la familia, el trabajo y las inquietudes de cada uno más allá de lo que es el rock and roll. Entonces, tratamos de plasmar eso en las letras y a veces eso se nota y lo hace algo diferente, quizás a otras bandas del género. En cuanto a la musical, somos seis integrantes y es difícil. Cada uno con una personalidad bien marcada. Se hace una trama compleja, ¿viste? De seis instrumentos. Ariel, por ejemplo, no toca el bajo marcando las tónicas o las notas claves de cada acorde, sino que dibuja constantemente melodías. Eso se suma a lo que hace Adrián que también es muy personal. Adrián prácticamente fue autodidacta y logró un estilo que muy pocos tienen, hace unas especies de escalas propias y te va entrelazando todo el tiempo notas. Y eso sumado a la voz, el bajo y al teclado que también es un instrumento que hace melodías. Bueno, y la guitarra de Nacho si bien es más rítmica, también pone melodías. Eso hace una trama especial del sonido Blues Motel. A veces pienso “tendría que ser más limpio, más sintetizado todo, ¿no?” Más simple, no tan rebuscado. Pero después llego a la conclusión de que ese es nuestro sonido. Esas luchas internas que tenemos personales, de qué buscamos, de qué es mejor, que no. Si hay algo que tiene de bueno eso, es que hemos logrado una identidad que es lo que lo que debería buscar cada banda. Una banda de chicos que empiezan deberían intentar también ir a la búsqueda de eso, un un sonido personal, identificatorio.

Sí, hay algo que a mí me da la pauta de que está sonando Blues Motel, es esto que vos mencionabas: la guitarra de Adrián dialogando con la de Nacho. Es algo muy característico de ustedes… 

GD: Eso está buscado también. Bueno, a nosotros nos gustan bandas que tienen ese trabajo en estudio o en vivo. Que panean las violas, están jugando una con otra constantemente. Bueno, se suma el bajo también, pero si, es buscado. En el estudio nos lleva bastante tiempo definir eso y también buscar un lugar. Somos seis opinando y a veces se hace difícil, pero a veces decimos “Qué bueno sería que un productor esté al mando de todo como para que decida él”. Darle la responsabilidad de la decisión final al productor. Lo vivimos una sola vez con el disco “Siglo Desastre” y fue un relajo en ese sentido, nos alivió bastante.

Otro detalle que también caracteriza a Blues Motel, es el tema de la independencia y la autogestión. Como muchas bandas en su momento, ustedes arrancaron trabajando con discográficas, pero llevan muchos años en el camino de lo independiente. ¿Cuánto influyó esa decisión en su proyecto artístico?

GD: Y yo creo que un montón, porque el proyecto artístico lo comandamos nosotros siendo independientes. Vale aclarar que es una decisión o una condición a la que un poco nos fuimos acomodando. No es que renegamos de estar con un sello discográfico. Si nos hubiese contratado en su momento un sello, por ahí la realidad de la banda sería otra o tendríamos esas cosas buenas. Pero bueno, haciendo la aclaración y siendo banda independiente está bueno también charlar de las cosas que sabemos valorar de esa condición y una de esas es que no hay ninguna discográfica ni otra persona extra en la banda que decida «Che, tienen que hacer tal tipo de canción o tienen que elegir tal tema para para difusión o tienen que tienen que salir de gira y tenemos que ir a tocar a tal lado.» Esa es la ventaja. Lo decidimos nosotros. 

Y volviendo a este show en el Centro Cultural Richards, ¿en qué estado llega Blues Motel a estas tres fechas? y para aquél que los ve por primera vez, ¿Con qué se va a encontrar?

GD: Bueno, esto va a ser una grabación en vivo de temas ya editados pero con la actual formación, donde entró Pucho en la batería desde el 2018. Vamos a refrescar canciones que venimos tocando en vivo hace mucho y que ya suenan muy diferente a como fueron grabadas en su momento. Nosotros tenemos una discografía de 13 discos, elegimos un poquito de cada uno. Estamos en una etapa donde ensayamos muchísimo, buscamos algunos arreglos específicos para notar cierta diferencia con los temas originales. Va a sonar la banda en vivo, eso a veces es un desafío cuando vas al estudio. Es decir, «Yo quiero sonar como una banda en vivo.», porque nos gusta bandas de garaje o de rock como nosotros y a veces no se logra. Entonces, la ventaja de un disco grabado en vivo es esa: va a reflejar la esencia de Blues Motel. Somos más fuertes en vivo que en estudio. Tenemos una energía linda entre nosotros. A mí me gusta mucho generar esa energía e ir llevándola por diferentes climas. Como Frontman, me siento muy bien en ese rol. La gente tiene una conexión divina porque nos conoce desde hace muchos años. Sabe que está con una banda referente, medio exclusiva, de culto, por decirlo de alguna manera. No es una banda muy conocida, también eso tiene tiene una ventaja.

Y te puedo decir un motivo extra. Originalmente lo íbamos a hacer en mayo y Adrián dos semanas antes de estas presentaciones tuvo un ACV. Fue durísimo. Bueno, reprogramamos los shows con la esperanza de que él se iba a recuperar en dos o tres meses y hace un mes y medio más o menos fue el momento en donde él retomó los ensayos. Nosotros no sabíamos cómo lo íbamos a ver y, fue un momento superlindo. Lo vimos recontra recuperado, muy bien, muy seguro. Había estado tocando la guitarra todos los días desde el episodio del ACV y eso le vino muy bien para recuperar rápido su motricidad específica. A partir de ahí ya se fue ensamblando de vuelta el motor de Blues Motel. Entonces, esta es la primera presentación después de esa suspensión, así que tiene una carga emotiva importante.

¿Qué es lo próximo que se viene para la banda? 

GD: Bueno, terminamos los tres shows y nos vamos a tener que ocupar de seleccionar, editar e ir decidiendo qué temas queremos que vayan al al disco. Son entre 40 y 50 temas entre los tres shows , por eso nos va a tener ocupados bastante tiempo. Mientras tanto tenemos shows, tenemos un lindo show el 11 de octubre dentro del marco de las ediciones doradas de Makena, que también va a quedar registrado, así que va a ser un show importante. Una vez Adrián ya esté recuperado, la idea era reprogramar lo que queda del año y cumplir con ciertas presentaciones en diferentes lugares para luego arrancar y planificar un nuevo año. Vamos a estar ocupados en sacar lo antes posible el disco en vivo. No sabemos cuánto nos va a llevar porque es un trabajo difícil.

Blues Motel se presentará el próximo sábado 11 de octubre en Makena (Fitz Roy 1519, CABA) en el marco del ciclo “Ediciones Doradas”. 

Más info en: