Leonardo del Castillo, Karina García y Mariana García, dialogaron con Prisma Producciones sobre los inicios, el presente y un futuro que augura más encuentros, más pasión y más arte en la primera sala de teatro independiente de Berazategui.
- Entrevista: Ivana Nitti y Julián Retamozo
- Fotografía: Camila Peñalva
- Texto: Ivana Nitti
- Voz en Off y edición de audio: Julián Retamozo
“El arte es transformar y transformarse”
También es “algo que hace muy bien y que es necesario”. El arte, “sensibiliza, nos hace mejores seres humanos. Permite conocerse y conectarse con uno mismo y entablar lazos con el otro. Es un punto de encuentro con el otro. Poder ser uno mismo y también ser otro. Te permite vivir otras realidades y te ayuda a comprender la realidad”.
Cual término abstracto difícil de definir, el arte es también aquello que se practica y respira en Índigo Teatro. Una propuesta independiente, singular y diferente que abrió sus puertas en 2012 y que, al presente, “estamos siendo una posibilidad, una alternativa cultural cada vez mas plantados y desarrollándonos con esto que nos apasiona y que es el teatro”.
Desde la organización, las propuestas son variadas pero todas bajo el mismo espíritu: “nuestra intención es que la gente salga movilizada porque, entendemos, al teatro le interesa modificar, conmover, emocionar y eso es lo que tratamos de hacer. Siempre en este camino de buscar variantes, cosas distintivas y mostrar un espectáculo de calidad”.
Teatro en completa oscuridad, primero con La Tempestad de William Shakespeare con la aceptación del público y una permanencia de tres años, y ahora El escarabajo de oro de Edgar Allan Poe, son solo algunas de las propuestas que propone Índigo, convirtiendo al espacio pionero en la ciudad, innovando y (re) creando obras de calidad: “tenemos tres pilares que son fundamentales: los espectáculos, los talleres y las funciones de teatro para escuelas”.
-¿Cómo es la experiencia del teatro en completa oscuridad?
– Bueno, en el caso del Escarabajo de oro, es una experiencia teatral sensorial en donde se inhibe la visión para potenciar el resto de los sentidos. Yo (Leonardo Del Castillo) trabajé en rehabilitación muchos años y con personas no videntes. Luego comencé a dar clases de teatro para ellos y me fue picando esta cosa de armar algo diferente. Me parece que vivimos en una sociedad donde lo visual es todo, entonces la idea es poder encontrarse desde otro lugar. Por eso es una experiencia teatral-sensorial, porque al no ver por completa oscuridad, los demás sentidos se potencian y esto tiene que ver con el sentir de otra manera, cosa que últimamente se está perdiendo. Sin dejar de ser una obra de teatro donde hay un hecho artístico, el fundamento es brindar un espectáculo de calidad, movilizar y salir de lo cotidiano. El espacio se hace otro, y resulta algo novedoso que invita a conectarse con el sentir y a corrernos un poco de la cotidianeidad que tenemos todos de la visión, del ya, del vértigo. La propuesta es instalarse una hora a conectarse con una experiencia diferente”.
Inmerso en un partido en donde se apela a la producción cultural y, entre sus variantes, teatral: “la relación con el municipio es muy buena. Hay un ida y vuelta y no una competencia entre estado municipal y privado. Sino que por el contrario, sabemos que entre ambos podemos potenciarnos. Hay un apoyo desde la promoción o de necesidades que se requieren, pero siempre con los brazos abiertos por ambas partes”.
-¿Cómo es la relación con la comunidad?
– Diríamos que la gente cada vez nos va conociendo más y así se va acercando a nuestras propuestas. Estamos siendo una alternativa teatral independiente con mayor reconocimiento. La gente valora que brindemos un espectáculo de calidad y nosotros valoramos que dediquen un tiempo en acercarse.
– Otra de las grandes propuestas de Índigo es el teatro para niños. ¿Cómo es entonces, esa experiencia?
– Lo primero que debemos decir es que no es un género que hayamos inventado nosotros, sino que el teatro para niños ya existía previamente y hay algunas experiencias por ejemplo, en Capital Federal. Desde Índigo, fue pensado desde la óptica de distintos profesionales, y lo pensamos mucho en el antes para brindar algo de calidad pensando en el publico hacia el cual se dirige, desde los seis meses a los tres años de edad. La experiencia es muy enriquecedora, sobre todo, ver las expresiones de los chicos.
El equipo de trabajo está conformado por diferentes áreas, pensadas todas, desde la misma pasión al teatro: “Leo (por Leonardo Del Castillo) está en espectáculos y es quien va formando distintos elencos; en el área de talleres hay distintos profesionales, también tenemos colaboradores y la parte de la comunicación. No queremos olvidarnos de ninguno, pero lo más relevante es destacar que todos son profesionales que trabajan con la misma pasión por el arte que tenemos nosotros”.
Según los integrantes de Índigo Teatro, los sueños están para cumplirse y en ello se enmarca el deseo de que “esto siga creciendo y que cada vez sea más grande. No solo en lo que refiere a la parte edilicia sino también, en generar más encuentros y más arte en este espacio, en donde proyectamos seguir con lo que venimos haciendo, sumado a continuar con El Escarabajo, incorporar dentro de poco la obra La Fiaca que es un clásico argentino; teatro para niños y también, la propuesta que está muy de moda hoy por hoy, de ofrecer en un mismo espectáculo seis distintas obras, en lo que se denomina mini teatro”.
Con más de una propuesta, en Índigo se van a encontrar con un ”lugar donde pueden venir a pasarla bien y a encontrarse con el arte”. Así es, vale la pena encontrarse con aquello que saca lo mejor de uno.
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