El próximo sábado 4 de mayo Blues Motel celebra sus 35 años de carrera con un show histórico en Niceto. Repasamos la historia de la banda junto a Adrían Herrera. Una trayectoria que sabe de grandes hitos que incluyen 13 discos y un encuentro cara a cara con Mick Jagger.
- Reportaje y texto: Julián Retamozo
El próximo sábado 4 de mayo Blues Motel presenta un show histórico festejando 35 años de carrera, cita imperdible para celebrar la actualidad y vigencia de esta legendaria banda argentina, que supo mantenerse generando nuevo material y presentándose en vivo sin descanso para transformarse en referente dentro de la escena.
Niceto será el escenario de una selección exclusiva de sus mejores discos y canciones y, obviamente, mucho rock and roll sobre el escenario.
Repasamos la historia de Blues Motel junto a Adrían Herrera, guitarrista de la banda. Una trayectoria que sabe de independencia, autogestión y grandes hitos que van desde editar 3 discos en un año hasta un encuentro cara a cara con el mismísimo Mick Jagger.
Están cumpliendo 35 años como banda, ¿cómo ves a Blues Motel ahora en relación a los pibes de Tigre que se juntaron a tocar por primera vez?
AH: Es increíble cómo pasa el tiempo cuando uno hace algo que le gusta. El 19 de marzo fue el aniversario del primer show de Blues Motel. En esa época, los stones lanzaron un documental llamado “25×5”. Nosotros decíamos “Ojalá llegásemos a los 25 años”. Nos parecía una locura, un montón de tiempo. Algo que no era normal en una banda de rock. Nunca pensamos que iba a ser algo que iba a durar. Yo había empezado la carrera de Diseño Gráfico, me gusta dibujar, tengo un costado artístico. Pero la vocación no la descubrís cuando tenés 16-18 años, es muy complicado. Empezando con todo esto, descubrí que lo que yo quería hacer era tocar la guitarra, hacer canciones y tener una banda. Mis compañeros de carrera estaban desesperados por irse a la expo de tal diseñador y yo me quería ir a tocar la guitarra. No tenía idea de si esto iba a prosperar, pero el plan estaba. El tiempo pasa volando, uno disfruta haciéndolo y no se da cuenta.
Su debut fue el 19 de marzo de 1989 en un show en el Anfiteatro de Tigre. En el año 1994 registraron su primer álbum «Vol.1» para Trípoli Discos, como punto de partida para una carrera ininterrumpida que los llevó a visitar los festivales y escenarios más importantes del circuito de Rock en la Argentina: desde los clásicos y fundacionales Die Schule, Arpegios, Cemento, República Cromañon, Teatro Astros, hasta los actuales Trastienda Club, El Teatro Colegiales, Teatro Flores, Niceto Club, ND Ateneo, Pepsi Music, Cosquín Rock, Gesell Rock, etc.
¿Tenés algún recuerdo de ese primer show?
AH: Sí, eso se te queda grabado. Fue un domingo. La hermana de Gaba cumplía 15 años un viernes y nos había invitado a tocar en su fiesta un sábado. Tuvimos que alquilar cosas el viernes y había que devolverlas el lunes. El show del domingo surgió de golpe, lo tuvimos que armar con las cosas que habíamos alquilado. Le pedimos permiso al director de Cultura de la Municipalidad de Tigre para tocar en el anfiteatro (donde sabíamos que cada tanto tocaban bandas). Lo organizamos y en principio le avisamos a nuestros amigos y que ellos a su vez le avisen a sus amigos. Ni teníamos nombre, tuvimos que ir descartando varias opciones hasta que quedó Blues Motel. Fuimos temprano a ensayar las canciones que íbamos a tocar. Habrán sido 10 o 12 canciones. De hecho, el bis fue realmente un bis: tuvimos que repetir una canción que ya habíamos tocado porque no teníamos más.
A ustedes se los emparenta con la escena rolinga, siendo que su estética musical va mucho más allá de lo que se conoce como rock stone…
AH: Desde el principio, a nosotros nos gustaba otra cosa. Obviamente nos gustaban los stones, ni hablar, pero éramos muy abiertos musicalmente. Escuchábamos mucha música, también nos gustaban los Who, a Gaba le gustaba Zeppelin, a mí Kiss. También Pappo… Había muchas cosas que nos gustaban. Eso se nota en el primer disco, que es una especie de bibliografía de todo lo que escuchábamos, leíamos y conocíamos de otras bandas. Aparte, la parte de los stones que nos gustaba a nosotros, por ahí no era la que más se reflejaba en la “patria stone” (que ni existía en ese momento). A ellos les gustaba más la etapa de los ‘80 en adelante. Nosotros éramos más fanáticos de los ‘60, los ‘70 con Mick Taylor.
Hay muchas bandas que, cuando les preguntan por sus influencias, dicen “Blues Motel”, ¿qué opinas de eso?
AH: Es muy loco y es parte de lo que nos pasó a nosotros también con otras bandas. Tocamos hace muchos años y hay bandas que ni nos vieron o nos vieron poco. Es normal que la banda que vos escuchás sea la que te influencie. A nosotros nos sirvió conocer todas las influencias que tenían las bandas que nos gustaban: los Stones, los Who, Zeppelin… Creo que acá pasará algo similar: nos escucharán a nosotros y de ahí pasarán a ver cuáles eran las bandas que a nosotros nos gustaban. Eso también está bueno.
Después de sus primeros tres discos, en el año 2001 emprendieron una aventura independiente grabando a partir de ese momento 13 trabajos discográficos totalmente autogestionados.
Un sello que distingue a Blues Motel es el tema de la autogestión y de la independencia. Ahora con el paso del tiempo, ¿qué importancia tuvo haber tomado esa decisión?
AH: Cuando nosotros arrancamos con la movida independiente, la única banda independiente que existía eran los Redondos. Antes pasaba al revés: vos tenías que firmar con una compañía para que se te fabrique el disco y éste pueda llegar a las disquerías. No era normal ser independiente. Cuando arrancamos, hicimos 3 discos con compañías discográficas y recién en el cuarto dimos el salto a nuestra carrera independiente. Un poco por todo lo que fuimos aprendiendo en esos años y un poco por lo forzada de la situación. Lo que nos ofrecían las compañías eran grabar el disco, distribuirlo en disquerías y no más que eso. Dijimos “eso es algo que podemos hacer nosotros sin quedar pegado con nadie” Ya nos había pasado de quedar pegados y guardados por bastante tiempo. Queríamos sacar discos con un intervalo de un año entre cada uno. Eran cosas que queríamos cambiar y que podíamos hacer si nos encargábamos de todo el negocio.
En 2006 metieron 3 discos en un año, ¿cómo fue eso?
AH: En ese momento justo había pasado la tragedia de Cromañón y, sin contar lo triste del evento en sí, para una banda era casi imposible tocar. Cada vez había menos lugares y más restricciones. Fue un año complicado y esa fue una manera de mantenernos en movimiento. Hicimos una reunión en mi casa y la charla fue:
“-Hagamos esto…
– Pero ya se hizo.
– Bueno, hagamos un disco doble.
– Eso también se hizo.
-¡Bueno, hagamos 3!”
Tocamos en el Gesell Rock a principios de 2005 y en la rueda de prensa hablamos de más: “Sí, vamos a hacer 3 discos”. Ya no había marcha atrás, había que seguir con el plan (risas) Teníamos claro que el primero iba a ser eléctrico y el segundo acústico. No teníamos claro qué iba a pasar con el tercer disco. Nos dimos cuenta que había canciones que no entraron en los 2 anteriores, pero que podían convivir juntos. Asíque fuimos por esa vía.
Actualmente, Blues Motel está compuesto por Gabriel Díaz (voz, guitarra acústica y armónica), Adrián Herrera (guitarra eléctrica y coros), Ariel Herrera (bajo y coros), Sebastián Voyatjides (teclados y coros), Nacho Piedrabuena (guitarra eléctrica y coros) y Pucho Led (batería).
Son una banda que tiene muchas mixturas (musicales e instrumentales), abarcan diversos estilos. Hay todo un detrás en la música de Blues Motel…
AH: Tal vez tenga que ver con las bandas que escuchamos o que nos gustan. Quizás la apertura musical que tenemos. No nos quedamos con un estilo ni hacemos todos los discos iguales. Justamente, una de las cosas que nos pasa siempre -incluso habiendo cambiado de formación- es que los que entran a la banda nos miran y nos dicen “Che, esto se parece a tal cosa que ya hicieron en tal disco”. Lo que sea repetitivo al toque lo descartamos. Siempre, dentro de lo que somos, estamos buscando algo nuevo. Está claro que tenemos un estilo, pero tratamos de no reprimirnos y hacer cosas que no hayamos hecho antes.
La banda celebró la tan esperada y merecida aparición en el documental de los Rolling Stones: «¡Olé, ¡Olé, Olé!: A Trip Across Latin America», película que refleja el último paso de los stones por América Latina. Gabriel Díaz y Adrián Herrera, tuvieron una entrevista con Jagger en camarines en la previa de uno de los shows. La propia gacetilla del lanzamiento en uno de sus pasajes señala: «Es así como se ve a Mick Jagger explicar a cámara la existencia de «the rollingas», una tribu urbana única en el mundo que profesa una total devoción por los Stones, o conversar unos minutos con los músicos de Blues Motel.»
Previo a la última visita de los Stones, se hicieron encuestas al público sobre qué banda les gustaría que los telones. Y en todas ganaba Blues Motel, pero ustedes se llevaron el premio mayor que fue conocer a Jagger, ¿cómo fue esa charla?
AH: Fue algo impensado. El tema de ser soporte de una banda es un tema de transas y arreglos entre compañías discográficas, cosa que a nosotros nos era imposible porque estábamos totalmente afuera de eso. Sabíamos que a la gente le gustaba la idea, pero era algo a lo que no íbamos a poder acceder. Lo de participar en la película nos llegó muy de sorpresa. Los Stones fueron girando por toda Latinoamérica y fueron haciendo la película con partes de cada país en el que se presentaban. Cada país tenía su productora correspondiente. Nos contactan en vacaciones, me llega un mensaje de una mujer que trabajaba en la producción de los Stones y nunca creímos que fuera posible. Se gestó una reunión, fuimos a tocar, nos hicieron una nota y filmaron en nuestra sala. El día del show nos vinieron a buscar y dijimos “La puta, ¡está la van afuera!”. Llegamos, nos pusieron una calco, nos dieron las entradas y dijimos “Aunque sea vemos gratis a los Stones”. Entramos al estadio y nos encontramos con gente de la productora que nos dijeron “Bueno, ustedes ahora se van a ir a hablar con Jagger”. Habrá pasado media hora en total, pero no podíamos asimilarlo. Gaba estuvo repasando algunas cosas que podía decir en inglés y salió. Cuando se dio, no lo podíamos creer.
Es el sueño del pibe…
AH: Era tener en persona al tipo que le fotocopiábamos sus fotos y las poníamos en las carpeta cuando éramos pibes. Estábamos ahí, lo teníamos enfrente hablándonos. Es una personalidad mundial, clave en la historia de la música, del arte. Cuando lo pensás fríamente, estuvimos en la película, aparecemos tocando “Dame Magia” que es un tema nuestro. No hay muchas bandas que toquen sus temas propios en una película de los Stones. Fue todo muy loco y muy paso a paso, tal como si fuese un resumen de nuestra carrera.
“¡Por el Aire!”, es el último disco de Blues Motel lanzado en 2023 a través de las plataformas digitales. El disco fue grabado en Estudio 505 por Francisco Márquez y Francisco Marafioti, mezclado por Francisco Marafioti y masterizado por Maximiliano Scenna. Con un sonido novedoso y una trama en la que cada instrumento y la voz se entrelazan, la banda logra un clima potente y una identidad única que es su sello distintivo. En este trabajo la búsqueda musical pasa por un sonido de batería más moderno, un bajo más presente en igual plano que las guitarras y el teclado. Un disco de rock con todas las aristas del género, la potencia, las canciones de fogón, el blues y las baladas. Las letras retratan personajes reales e historias ficticias con prosas que recorren muchas de las vivencias que atraviesa el grupo.
35 años, 13 discos… es un montón. “¡Por el aire!”, su último disco, fue lanzado el año pasado. Si bien ustedes ya habían lanzado singles adelantos del mismo, ¿Cómo fue el trabajo de producción de este álbum?
AH: Fuimos sacando singles porque fuimos probando cosas. Y, tal como nos pasó con “¿Cómo no vas a querer?”, sentíamos que éramos una banda diferente a la que había grabado los discos (de hecho, teníamos otro baterista). Acá pasó algo similar. Decidimos hacer un disco nuevo con canciones que veníamos preparando. Hicimos 3 canciones que funcionaron como adelanto y eran una muestra de cómo era la banda en ese momento. Vimos que nos encaminábamos hacia otros sonidos (si bien no dejaba de ser una banda de rock). Después todo se decantó hacia el disco, porque somos de la vieja escuela del disco. Aún no lo hemos sacado en formato físico, pero ese no deja de ser un plan. Lo hicimos por esta vía porque era más rápido y fácil hacerlo así. Nos gustó la gente con la que trabajamos, el estudio y demás. Nos encaminamos en este proyecto y así salió “¡Por el aire!”.
Se viene el show en Niceto para celebrar los 35 años y presentar “¡Por el aire!”, ¿Qué expectativas tienen de cara al show?
AH: Ojalá que a la gente le guste y la pase bien. Estamos armando una lista de temas lo más larga posible en relación al horario que tenemos. Parezco Scaloni cuando se queja de que tiene más jugadores para convocar de los que le permiten (risas). Pero está bueno que sobre y no que falte. Venimos trabajando en una lista de alrededor de 40 canciones que sabemos que les gusta a la gente. Algunas las pidieron, otras son más raras. Pero llega un momento que te dicen “¿Pero esta no la vas a tocar?”, “¿Esta otra tampoco?” No va a alcanzar para todo lo que queremos hacer. Lo que sí tenemos en claro es que tenemos que hacer que la gente esté a full, on fire todo el tiempo desde el primer acorde hasta el último y disfrutando el show con nosotros.
¿Qué es lo próximo que se viene para la banda?
AH: Para el resto del año, el plan es celebrar estos 35 años tocando en todos los lugares que se pueda. Y después grabar. Cada disco anterior te deja ideas y planes para grabar el próximo. No sé si serán canciones nuevas o un “¿Cómo no vas a querer? Volumen II”. Por otro lado, en todo este tiempo la manera de escuchar música cambió. Es difícil escuchar un disco entero, por ahí se escucha una canción o 2. Tampoco escapamos a la idea de hacer una canción. El tema de la independencia tendrá miles de contras, pero lo bueno es que vos elegís qué hacer y en qué momento. Es algo que iremos decidiendo nosotros mismos.
Blues Motel se presentará el próximo 4 de mayo a las 20 hs en Niceto (Niceto Vega 5510, CABA). Entradas a la venta en Passline.
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