Manu Hattom llega al escenario del Teatro Astros para presentar su último disco «La canción perdida» y celebrar una década de trayectoria artística. Dialogamos con Manu sobre el show y su carrera artística multifacética.
- Reportaje y texto: Julián Retamozo
El próximo 13 de abril Manu Hattom, uno de los artistas más sensibles de la escena musical actual, subirá al escenario del Teatro Astros para presentar «La canción perdida», su último disco, y celebrar una década de trayectoria artística. Manu hará un recorrido por las canciones que marcaron su carrera junto con nuevas versiones de sus canciones.
Dialogamos con Manu sobre este show trascendental en su carrera y el devenir de una trayectoria que le permitió cumplir sueños e incursionar en otras ramas del arte como la actuación.
Estamos a días no más de un show particular en un escenario particular como es el Teatro Astros. ¿Cuáles son tus expectativas, ansiedad, nervios?
MH: Bueno, siempre un show grande, hay como muchas cosas muchas muchas cosas que atender, ¿viste? Me parece que lo que más ansiedad da es que salga todo bien, no solo la parte musical, sino que va a ser un show que se va a filmar y se va a grabar. Por ende, estoy bastante obsesivo con la cuestión de que haya el menos margen de error posible en todas las áreas. La banda suena bien, no tengo dudas de eso, pero quiero pensar cómo se va a filmar el material, cómo se va a grabar y todas esas cosas. Y al ser un teatro donde probablemente no haya tantos proyectos musicales sonando hoy en día, es un desafío lindo. Estamos trabajando para eso y creo que lo tenemos bastante aceitado para ese día.
¿En qué etapa actual ¿cómo te encuentra artísticamente en este show en el Astros?
MH: Bueno, nosotros estamos armando un show que es muy similar a lo que eran los MTV Unplugged. La idea y la bajada musical es por ahí. Somos una banda de nueve personas donde hay percusionista, violinista, guitarrista, bajista, corista, baterista. Hay invitados. Por momentos con invitados vamos a ser 10 personas, pero lo que quisimos hacer con el show fue agarrar 15, 16 canciones y pasarlas por ese filtro. Que suene lo más unplugged posible como era el disco de Charly o el de Spinetta. Armamos todo un disco para eso. Yo me puse a grabar los demos de las canciones que ya había grabado, pero empecé a producirlas para para que suenen un poquito y reversionar las que eran más eléctricas para llevarnos un poco más a este plano que yo quería hacer. Es un disco que hace mucho tengo ganas de hacer y la verdad que todo confluyó manera genial porque de repente estaba el Astros. Como que junté muchas cosas en un mismo día.
Cabe destacar que su más reciente álbum cuenta con la mezcla del reconocido productor y músico Tweety González, y colaboraciones de lujo: Rosario Ortega («Luna llena») y Juliana Gattas («Querida»).
Aparte has tocado con músicos de renombre que incluso han participado en tus discos como Tweety González, Rosario Ortega… ¿Cómo fue trabajar con ellos?
MH: Bueno, en todos los casos grabamos una canción por separado: con Juliana Gattas grabamos “Querida” y con Rosario Ortega “Luna llena”. Los dos casos fueron muy similares: nos juntamos a ver las canciones que yo les había propuesto a las chicas para cantar conmigo, me parecían que sus voces estaban perfectas en la canción. Nos juntamos a repasarlas y en una hora, hora y media, ya estábamos grabando. Fue bastante rápido. En el caso de Tweety, hicimos todo el disco con él como productor. La verdad aprendí mucho con él. Tiene muy aceitado lo que es la producción y sobre todo lo que es la edición del audio. Para mí la tiene muy clara y llega como al producto final muy rápido. Fueron experiencias muy lindas con gente que trabaja hace mucho, que hace esto hace mucho.
Bueno, en tu caso también ya llevas 10 años de carrera. ¿Qué balance haces de toda tu trayectoria?
MH: Siempre pienso lo mismo, miro para atrás Y pasaron un montón de cosas lindas. La verdad que me siento exitoso con este proyecto porque pude hacer muchas cosas que quise y que soné con la música. Hablando de objetivos personales, haber tocado con Fito Páez, haber hecho un disco con Tweety González… para mí eso va a ser exitoso. Grabar con Juli Gattas, con Rosario, con Julieta Zylberberg, con Mariano de Mi Amigo Invencible, son todas cosas que a mí me gustan mucho. Y poder hacer los discos que a mí me gustaron. Miro para atrás y la verdad me siento muy afortunado. Nunca pensé un objetivo claro y ahora miro para atrás y me parece que todo lo que se construyó está bien y me hace bastante feliz. Nunca disfruto en el momento, ponele el teatro Astros probablemente lo disfrute a los dos días de haber terminado. Es como que siempre estoy con el motorcito encendido de querer hacer que las cosas funcionen y disfruto poco en el momento.
Recién mencionaste el tema de tocar con Fito Páez, ¿cómo fue esa experiencia?
MH: Bueno, yo escuchaba Fito Páez como casi todos nosotros. De chiquito en casa, mi viejo ponía “El amor después del amor” a todo trapo. Si bien siempre fue un sueño, yo tenía como tres o cuatro sueños: poder cantar con Fito, con Spinetta y con Chary. Después más de grande se me abrió el sueño de poder cantar con la Negra Sosa. Bueno, se nos fue Luis, se nos fue la Negra Sosa y Chary ya era muy inalcanzable y abandoné esos sueños. Y después naturalmente se dio lo de Fito por circunstancias extrañisimas: por redes sociales él me invitó a unos ensayos y yo viví el ensayo de Fito como si tuviera 14 años. Hoy nos vemos y abandoné esa figura de héroe, ¿viste? De repente estábamos tocando juntos en La Trastienda una canción mía o él venía a grabar a mi disco. Fueron dos o cuatro días donde conocí el punto máximo de la felicidad porque lo recuerdo mucho. La verdad fue una experiencia maravillosa, aprendí mucho de él y me di cuenta lo genio que es él al haberlo visto trabajar. Es muy obsesivo y tiene las cosas muy claras en lo musical.
Trabajó como productor musical y también compuso bandas de sonido para obras de cine y teatro, como «Congreso», del director Luis Fontal, «Mi primera Hiroshima», de Camila Fabbri, y «Mientras duró para siempre», de Mercedes Romero Russo. Durante el último tiempo ha estado explorando una nueva faceta como actor, con papeles en las películas «Tan perdida como convencida», de Mariana Sanguinetti y «Los restos fósiles», de Jerónimo Quevedo, ambas nominadas a festivales internacionales como Valdivia y San Sebastián.
Y no solamente en vos confluye el músico, también está el actor. ¿Cómo conviven esas dos facetas en la misma persona?
MH: Bueno, lo de actor es un poco cara dura, ¿viste? Me gusta meterme donde no me llaman y me gusta hacer cosas que ni siquiera tengo idea de cómo se hacen. En general en todas las cosas que actúo siempre actúo de mí, aunque siempre me dirigió y me dijo, «Ché, bueno, por acá hace esto y todo lo otro.» Es más de cara dura y meterme en un mundo que no conozco, eso me encanta. Tengo una frase que siempre llevo a cabo en el día a día que es “si me invitan voy”. Y ante la duda todo. Yo me mando. Me vi en el cine y no sé si la disfruto tanto. Me da un poco de vergüenza, pero en el momento me gusta estar. Me gusta mucho lo social, por lo cual me gusta participar de esas cosas. Ojalá en el futuro se pueda abrir más esa faceta un poco más profesionalmente y aprender un poco más.
¿Qué es lo próximo que se viene para Manu?
MH: Estoy armando canciones nuevas, viendo la manera de quizás meterme en el estudio a grabar un séptimo disco. Quizás lo haga, quizás no, no lo sé. Pero lo más probable es que me ponga a grabar un disco un poco más un poco más clásico. Tengo ganas de grabar un disco tipo guitarra y voz, dos guitarras y voces, algo así como el disco de Silvio Rodríguez. Estoy con esa idea, creo que todavía esa faceta no la exploré y me gustaría ahora más de grande explorar y tratar de llevarla a cabo.
Manu Hattom se presentará el próximo 13 de abril a las 20 hs en el Teatro Astros (Av. Corrientes 746, CABA). Entradas a la venta en Entradauno.com.

Más info en:
Comentarios recientes