La banda acaba de lanzar una nueva versión de “Valijas” en el marco de la actual cuarentena. Hablamos con ellos sobre su historia que los llevó de tocar en la calle a llenar escenarios importantes de Buenos Aires.
- Reportaje y texto: Julián Retamozo
En el marco de la actual cuarentena sanitaria, Paprika acaba de lanzar una nueva versión de “Valijas”. El tema, incluido en su álbum “Por la Borda” (2018), cambia su ambiente festivo para una reversión en formato tango acorde a los tiempos que corren. En palabras de la banda, la versión es “un tema de despedida a lo viejo y da la bienvenida a lo nuevo”.
Prisma dialogó con Guido Carmona, cantante de Paprika, sobre esta nueva versión que incluye además un video producido vía whatsapp y grabado desde las casas de los integrantes de la banda. Banda que supo construir su historia a base de sacrificio, autogestión y teniendo al arte callejero como insignia.
Están presentando una nueva versión de “Valijas” en el marco de esta cuarentena. ¿Cómo surgió la idea de versionar esta canción y la idea del video?
GC: Es un tema muy importante para nosotros. Muy lindo, forma parte de nuestro 2° disco y la verdad es que el “formato cuarentena” nos hizo trabajar de una manera a la que no estábamos acostumbrados. Nosotros somos del “piel a piel”, de estar todos juntos y componer juntos. Entonces, fue un desafío nuevo en el que nos encontramos con que “Valijas” fue una versión que transmitía mucha fiesta, con un estilo más balcánico, y con el que cerrábamos el show, la gente se ponía muy eufórica. Este tema transmite también un corazón muy roto, algo muy dolido y siempre soñábamos con hacer el lado tanguero de este temas. La cuarentena fue la oportunidad de hacerlo. Fue producirlo por whatsapp, ir mandando audios, cada uno grabó desde su casa, y quedó un resultado con el que estamos muy conformes.
“Por la Borda” fue grabado en Romaphonic y financiado totalmente por los shows en la calle, son una banda autogestiva. ¿Qué recuerdos tienen de grabar este disco y de dar ese salto cualitativo después de remarla en la autogestión?
GC: La verdad es que el mejor premio que se le puede dar a un artista es grabar en un estudio como es Romaphonic. Para nosotros fue muy gratificante porque realmente fue una experiencia de mucho sacrificio para poder llegar ahí. Recordemos que la mayor parte de las bandas independientes o autogestivas por ahí no tienen la posibilidad de llegar a un estudio como es Romaphonic y poder hacer todo el proceso correspondiente, pagándoles a todos los técnicos como corresponde (que son un montón, mas productores, más técnicos de sonido)… La verdad es que nosotros hicimos un esfuerzo muy grande de 2 años enteros saliendo a tocar más 3 o 4 veces por semana a la calle y todo eso juntándolo y guardándolo para poder reinvertirlo en un disco. Fue un proceso súper gratificante porque fue un laburo de muchísimo sacrificio y de pasar por muchas piedras para poder llegar a donde nosotros queríamos. Asique para nosotros es un sueño poder grabar un disco como lo hemos hecho y de una manera totalmente independiente y autogestiva. También nos demuestra que siguen existiendo las formas para poder llamar la atención sin ser parte de una gran discográfica ni de un movimiento tan masivo. Sigue existiendo todavía esa modalidad del boca en boca y de la posibilidad de que, si uno tiene ganas, poder crecer sin la necesidad de que haya un equipo masivo de por medio. Que sea la música con los músicos y el empuje mismo que tiene el arte.
Y ahora con la cuarentena, con la imposibilidad de salir a tocar al menos en la forma tradicional, ¿cómo lo están sobrellevando?
GC: La verdad es que mal, como todo el mundo. En nuestro caso, no solamente es una fuente de autogestión y de ingreso, sino que también para nosotros era un estilo de vida. Nosotros tocamos juntos hace 8 años y hace 6 que tocamos en la calle y es una rutina de casi todos los días. Entonces también te lleva a una convivencia que nos hizo romper con todo eso y replantearnos también cómo es el accionar de laburo, ya que hay un futuro tan incierto. Lo intentamos tomar con la mayor cautela posible. Cada uno se está ocupando de sus temas económicos que no son menores como le está pasando a todo el mundo. Y desde el lado del arte, seguimos conectados, seguimos comunicados vía Internet. Utilizamos mucho el espacio de decir “Bueno, es un buen momento para componer” asique estamos haciendo muchas cosas nuevas. La idea ahora es empezar a tener material nuevo para poder subir. Y más allá de que haya un futuro incierto, nosotros la verdad que al ser una banda autogestionada e independiente estamos acostumbrados a los problemas, a las piedras en el camino. Y creo que para nosotros fue “Bueno, esta es la situación reinante ¿cómo le hacemos frente?” No nos hacemos mucho tiempo para lamentarnos, sino que intentamos ver cómo es el accionar y cómo renovarse constantemente.
Fuente: Radio Zona Concordia
Bajo la consigna “Canciones útiles” Coti Sorokin emprendió una gira solidaria en la que junto a Paprika recorrieron Concordia, Colón y Gualeguaychú en un mismo día partiendo desde la terminar de Retiro en Buenos Aires. En cada parada, los músicos interpretaron un breve setlist con las canciones del cantautor pero aggiornadas al estilo Paprika.
El 2020 comenzó con un hecho lindo, con esa gira junto a Coti a principios de años. ¿cómo fue esa experiencia?
GC: Esa experiencia fue tremenda. Nosotros arrancamos el año con todo. Veníamos de cerrar el año haciendo en La Trastienda, en Niceto. Veníamos muy prendidos fuego. Coti nos cruzó en la calle, fue una amistad muy orgánica en lo que fue como un amor a primera vista mutuo. Él vio el despliegue que hacemos en la calle y lo quiso replicar un poco con sus temas. Aprovechando también la movida de que él tenía muchas ganas de salir por muchos lugares del Interior que hacía mucho que no iba y nosotros tenemos muchas cancha en el formato callejero-viajero. Clavamos un ensayo con él y después fuimos directo a tocar a Retiro. Después nos fuimos a Concordia, Colón, Gualeguaychú. Y apareció la pandemia lamentablemente. Coti iba a hacer un show en el Luna Park en el que estábamos invitados (lo que para nosotros era un honor zarpado) y la pandemia lo pasó todo. Mismo nosotros en abril teníamos un show en La Tangente que ya estaba agotado y tuvimos que devolver las entradas, afrontar los gastos de la fecha que ya habíamos pagado (flyers, técnicos, preproducción) y un montón de cuestiones que dolieron mucho. Pero también nosotros estamos contentos por todo lo que veníamos laburando y creemos que la pandemia es un dolor de cabeza, pero al mismo tiempo le estamos haciendo frente. Con Coti también seguimos al habla. Él está sacando muchos temas nuevos y cuando se libere la pandemia volveremos a lo que estábamos haciendo. Para nosotros es un gran motor, porque un artista de la talla de Coti nos dé el reconocimiento y nos permita también ir por más público para nosotros es súper interesante. Siempre estuvimos acostumbrado a tener un público más joven, adolescente. Y entre las tocadas en la calle y la relación con Coti también se estableció un público mucho más grande y mucho más chico al que también le queremos abrir la puerta. Me parece que la forma es entender que la música no tiene etiquetas. Entender cada vez más que no hay un público particular para la música y no intentar cerrarse. Siempre intentar abrir más y mas puertas para ver qué mas estilos nuevos podemos hacer, qué más podemos abarcar y de qué otras formas podemos hacer esto tan lindo que nos encanta hacer.
Está bueno eso, porque ustedes no se estancan en un solo género. Les es muy fácil reversionar temas. No sólo con sus temas propios, sino también se vio en aquella gira cómo a los temas de Coti ustedes le pusieron su impronta.
GC: ¡Sí, totalmente! Un poco también fue idea de Coti. Para él también fue algo nuevo porque él está mas acostumbrado a un perfil rock/pop, una cuestión más tranquila, más lenta. Y cuando hicimos ese cruce fue como “Che, bien, la combinación tiene que ser doble”. Él no quería que deje de ser un “Papriflash”, que es como nosotros le llamamos a lo que hacemos en la calle. Entonces en esa mezcla se dio como “bueno, negociemos”. Vamos con tus temas, pero vamos a hacerlos festivos. Vamos a hacer que, si se junta la gente, baile. Sobretodo los temas de Coti que para nosotros son impresionantes porque los conoce el que le gusta Coti y el que no también. Quieras o no, suena “Color esperanza” y por dentro la estás cantando. Poder sumarle nuestra esencia a esos temas que tienen tanta historia y son tan escuchados es súper divertido y la respuesta de la gente fue súper efusiva. Cuando tocamos en Retiro fue increíble. Vimos un Retiro totalmente lleno con gente bailando ska, pero escuchando temas de Coti. Era una combinación que te sacaba de lugar y nosotros lo que buscábamos era eso. No sé si queremos ser tanto esa banda de ska jamaica que hace roots y va a los orígenes. No. La verdad es que nosotros somos 10 músicos que escuchamos todos música distinta que nos encanta tocar y escuchar un montón de estilos y cada uno viene y trae su impronta. Entonces, en esa ensalada de frutas lo que está bueno es decir “che, vamos por lo que no hicimos”. Ésa es la apuesta que tiene Paprika: correrse un poco y decir “vamos por todo”. Me parece que así tiene y tendría que ser el arte. Creo que los reales artistas son los que están dispuestos a afrontar todo y a ponerse la camiseta del todo. Por ahí si no encontrás un lugar cómodo y te quedas ahí… yo creo que por esas cosas se terminan estancando.
En el año 2015, con el objetivo de cortar la rutina y llevar su música a quienes no pueden pagar una entrada, comenzaron con sus intervenciones callejeras llamadas PAPRIFLASH. Estas consisten en un show formato instrumental de 40 minutos con mucho baile e interacción con el público, dónde gente de todas las edades que pasan por el lugar paran para escucharlos y hasta hay quienes se animan a bailar contagiados por la energía que transmiten. Tiempo después formaron parte del Documental del INAMU (Instituto Nacional de la Música) «Músicos en los Espacios Públicos» transmitido por la TV pública donde se habla de las problemáticas de los artistas callejeros.
Ustedes llevan el arte callejero como bandera, han curtido su carrera en ese ámbito, ¿cómo ven la situación del artista callejero hoy en día?
GC: La verdad es que hay un bache legal muy grande. Es muy incierto para cualquier músico callejero estar en la calle. Son muchas las cosas que hay que entender y ahí es donde está el problema, porque hay veces que tenés que entender a los vecinos, que te tenés que cruzar con una mafia o con la policía. Hay veces que las leyes que te amparan la policía no las conoce. Mismas leyes que están en el Código de Contravención chocan contra las leyes que nos permiten tocar. Entonces, es muy importante entender que necesitamos una regularización que ampare a los músicos callejeros. Hay que entender que los músicos callejeros tocan para entretener a la gente. No para molestar a nadie. No somos una mafia, no somos ladrones. No merecemos estar bajo esa lupa y sin embargo es muy difícil. Nosotros tenemos muchos años tocando en la calle, de nunca en la vida haber dado ninguna coima ni a la mafia ni a la policía. Tenemos muchos años también del lado del Frente de Artistas Ambulantes Organizados. Es un grupo de gente que siempre está para ayudarnos. Yo lo que recomiendo siempre es que cualquier persona que sea musico callejero o tenga algun problema se acerque al Frente de Artistas Ambulantes Organizados. A nosotros siempre vienen a preguntarnos los que no saben. Es importante tener mucho respeto. En la calle uno tiene una responsabilidad muy grande. No es joda enchufar cualquier cosa eléctrica por un lugar donde pasan nenes caminado. Me parece que lo más importante acá es entender que lo que se está planteando con la música en la calle es arte gratuito. Es arte en la esquina, arte en los barrios. Es algo que está muy privatizado y uno a veces no se da cuenta que hay gente que no tiene la posibilidad de pagar $1000 lo que sale una entrada para ir a un teatro de la calle Corrientes o de cualquier show. No muchas veces tenemos la posibilidad de estar al lado de un obrero, un oficinista, un jubilado o un nene de 5 años y estar compartiendo ese mismo momento. Es un tema súper amplio, pero sí me parece bueno informar que existe el Frente de Artistas Ambulantes Organizados, que existe un artículo en el Código Contravencional que no permite que se haga una contravención a músicos siempre y cuando no estén tocando frente a ningún local haciendo competencia. Lo importante es tener cuidado. No es lo mismo cómo nos tratan a nosotros que somos 8 personas tocando juntas que cómo tratan a una persona tocando sola en el subte. Entender que la ley 6128 artículo B de la contravención que ampara a cualquier músico callejero de que no le pueden llevar los instrumentos y no puedan labrarle ninguna contravención. Ningún fiscal puede actuar de oficio, que es algo que la policía te suele decir. Si te quieren levantar, necesitan levantar una denuncia por ruidos molestos y si el denunciante es anónimo, no hay nada que lo verifique. Entonces, tiene que estar el denunciante. Son muchas cosas que se van aprendiendo, pero sí está bueno que si un músico se va a largar a tocar en la calle que hable primero con su músico callejero de confianza y le pregunte cuál es el circuito que hace, por dónde anda. Y lo que sí, nunca colaborar con ninguna mafia (sea de subte, de tren o de calle). Nunca, pero nunca, coimear a la policía, porque eso sería un gran problema para todos los demás que justamente estamos buscando que esas cosas no pasen.
A lo largo de su historia y con 2 discos en su haber, «Patada En La Nuca» (2017) y «Por La Borda» (2019) ha recorrido distintos escenarios como Niceto Club, La Trastienda, Groove, C.C Konex, Uniclub, The Roxy Live llevando su fiesta de Ska, Reggae, Rock, Funk y Punk.
Ustedes se han curtido en esa escuela y también han tocado en escenarios como Niceto, La Trastienda y el CC Konex. ¿Qué aprendizajes y qué experiencias les dejaron esos shows?
GC: Lo primero y principal es que el sacrificio da resultado en cualquier proyecto y en cualquier rama del arte. Nosotros somos muy sacrificados, laburamos hace muchos años y laburamos mucho. Reinvertimos todo lo que ganamos en escenografía, en show, en vestimenta, traer nuevos artistas, hacer cosas nuevas, grabar temas nuevos. Nosotros cuando arrancábamos a hacer esto soñábamos con tocar en el Konex, llenar La Trastienda, grabar un disco en Romaphonic. Y ahora que lo estamos haciendo, soñamos con viajar a México y seguir creciendo. Me parece que eso es lo más interesante: estar todo el tiempo persistiendo, todo el tiempo teniéndole fe a su proyecto. Intentar hacer lo que a uno le gusta. Nosotros somos muy felices haciendo lo que hacemos. No hay nada más que un sentimiento de felicidad cada vez que tocamos en la calle. Lo sentimos cada vez que subimos a un escenario. Y creo que también esa efusividad es lo que le llama la atención a la gente, asique es muy importante tenerle mucho amor al proyecto y ser muy persistente. Ésa es la palabra, por lo menos para nosotros: persistencia.
¿Qué es lo próximo que viene para Paprika?
GC: Estamos grabando un par de temas que no tienen nada que ver con nosotros. En el segundo disco ya habíamos metido una salsa, un funk y tenemos ganas de seguir por ese lado. Queremos hacer cosas nuevas, muchos temas que van a ser distintos uno del otro. Estamos muy a full en la parte de composición, creemos que vamos a poder sacar de acá a 2 meses 3 o 4 temas nuevos que para nosotros es muy importante y está muy bueno. Mientras tanto seguimos completamente preparados para cuando se levante la cuarentena y salir a la calle. Tenemos muchas ganas de volver al escenario. Nosotros somos músicos de hace muchos años y no estamos acostumbrados a pasar tanto tiempo sin pisar un escenario. Es la droga del músico. Ya estamos pensando un show para la vuelta que va a ser totalmente imponente y vamo a dejar todas las fichas ahí. Por lo pronto, lo que puedo decir es que sintonicen Spotify y Youtube porque van a salir unos temas muy buenos. Un poquito el aire a que se termina la cuarentena se esta sintiendo (o por lo menos que se flexibiliza un poco más), asique bueno, a la espera de eso para volver al ataque.
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