Buitres, la mítica banda uruguaya, celebra sus 30 años de carrera el próximo 22 de agosto en La Trastienda. Prisma dialogó con Gustavo Parodi y Gabriel Peluffo sobre la trayectoria de la banda y sus próximos desafíos.

  • Reportaje y texto: Julián Retamozo

Nacida luego de la disolución de Los Estómagos, al calor de fines de los ‘80, Buitres Después de la Una cumplió 3 décadas de música. Dicho aniversario ameritó una gira que comenzó en el mes de mayo con 2 shows “sold out” en el nuevo Antel Arena de Montevideo y que los traerá a Buenos Aires cuando los uruguayos pisen las tablas de La Trastienda el pŕoximo 22 de agosto.

Una vasta carrera con 15 discos editados y múltiples reconocimientos que van desde la Mención de la Presidencia de la República para representar a Uruguay en la expo Sevilla 92, dos premios Iris de El País y diversos premios locales Graffiti. Gustavo Parodi y Gabriel Peluffo fueron entrevistados por Prisma sobre todo lo que implican estos 30 años de trayectoria.

Están celebrando 30 años de carrera. ¿Qué reflexión les deja estos 30 años y cómo están llevando esta serie de presentaciones?

Gustavo Parodi: Lo que te deja todo esto es una felicidad enorme de poder desarrollar durante tan largo tiempo lo que te gusta. Tener una banda sobre todo con él… Más allá de los 30 años de Buitres, nosotros llevamos juntos 37 años (en un momento arrancamos como Los Estómagos, luego formamos Buitres) y es un placer poder llevar una carrera durante tanto tiempo, mantenerla, ser honestos y aún hoy seguir intentando hacer cosas. Más allá de que en tu país sos una banda establecida, grande, que ha logrado una cantidad de cosas muy importantes, el hecho de todavía tener la intención de seguir mostrándote a un público nuevo es fabuloso. No es para cualquiera.

Gabriel Peluffo: Coincido con Gustavo en que tener la posibilidad de seguir adelante con una banda como Buitres es un privilegio. Nosotros estamos orgullosos de todo este tiempo. Nuestra historia se ha edificado en función de querer tocar y componer. De hacer canciones juntos. Los mojones en los cuales se festejan años (en este caso los 30 años) tienen que ver en parte por iniciativa de la banda, pero sobre todo porque la gente nos pide que los festejemos. Y en este contexto en particular le agregamos el hecho de que mientras estábamos preparando los shows que fueron en mayo en Montevideo, volver a componer, fijar la grabación, empezar a grabar el disco nuevo y tener una gira armada que incluye una presentación en Buenos Aires.

 

 

¿Qué es lo que los sigue impulsando a seguir haciendo música?

Peluffo: Él te explicará por él porque toca todos los fines de semana y toca la guitarra todos los días, pero a mí particularmente porque es mi banda. Me gusta y me gusta estar con ellos y tocar. Tocar forma parte de mi vida. El hecho de hacer canciones tiene un atractivo enorme desde todo punto de vista (intelectual, artístico). Trabajar en grupo, hacer canciones con ellos y no con otras personas… Me parece que ése es el principal incentivo que uno tiene. También está la posibilidad de estar en una banda que toca cuando quiere tocar, no donde “hay que tocar porque…” o “grabar porque…”, sino que nos ponemos de acuerdo nosotros y llevamos el barco hacia donde queremos. Es también un privilegio. Es parte de tu vida independiente, de tu vida libre. Es de lo que uno aspiraría como individuo. Tener todas las posibilidades para desarrollarse y elegirlo todo, para nosotros es Buitres.

Parodi: Y la parte más importante que generalmente no se los nombra: la gente. Tu público, la gente que te sigue durante tanto tiempo. Si vos tenés la chance de hacer lo que te gusta, que nadie te presione a hacer lo que no te gusta, hacés tus canciones (las componés, las tocás) y a la gente le gusta lo que vos hacés… con más razón todavía ¿no? Porque de repente si vos fueras un artista que hace canciones y no va a ver nadie… ya es diferente. Vos estás comprometido con el público. Cubrimos una franja etárea muy amplia: nosotros ya estamos tocando para nietos de los tipos que nos vieron tocar por primera vez. Ese tipo de cosas te hace repensar lo que vos venís haciendo.

Una de las características que ha llevado a Buitres a consolidarse en el rock uruguayo es la estrecha relación entre la banda y su público. Lazo que la banda ha cultivado durante toda su historia y que hoy los lleva a tocar frente a público de 3 generaciones. Este respeto y dedicación del grupo hacia su gente se traduce no sólo en una motivación sino también en una exigencia a la hora de grabar o subir al escenario y brindarles la mejor experiencia posible.

¿Cómo llevan el hecho de tocar para varias generaciones?

Peluffo: En determinado momento nos empezaron a decir que estaban viniendo padres con hijos a ver el show. Fue una observación de la que no nos habíamos percatado demasiado. Todas las bandas de rock vivimos la experiencia de lo que fueron los festivales masivos en Durazno. Durante 6 años consecutivos en el centro del país se hacía un festival de rock que llevaba más de 100.000 personas (cifra que para el mundo es importante, no solamente para Uruguay). Ahí nos dimos cuenta del poder y la popularidad que tenía la banda. Eso generó un montón de experiencias compartidas de padres con hijos, hermanos mayores con hermanos menores, familias que iban a ver bandas… Nuestro grupo de seguidores se organizaba en grupos familiares. Grupos de fans pero de distintas edades, llevaban a los hijos y hacían tipo un campamento. Ahí se generó algo impresionante que se mantiene hasta el día de hoy, hasta los últimos shows que hicimos, donde va gente mayor, de mediada edad, gente con niños y de repente en el pogo, digamos, está la gente más joven. Gente que a los 40 años todavía les da para hacer pogo (risas). Es increíble, pero es un fenómeno que nos pasó a nosotros y está bien.

Parodi: Uno es un espectador extraño. Sobre todo por el hecho de que empezás a conocer a tu público. La gente que integra parte de ese público. Y pasa el hecho de que en ese público en determinado momento de la banda estaba Fulano que viví en tal barrio, Fulano que tenía tal barra. Y te invitaban a las barras a hacer comidas. De repente, esos tipos dejan de ir y decís “Puta madre, ya no les gusta más la banda”. A los 6 o 7 años los ves volver con un gurí en los hombros (risas). Claro, estos tipos tuvieron una vida: en algún momento tuvieron una pareja, se casaron, armaron su casa, tuvieron hijos, etc y ya no estaban para el tren de la banda y todo eso. Al tiempo vuelven con un chiquilín en los hombros y decís “Están ahí! todavía están ahí”. Hemos visto crecer a esos chiquilines y tener sus hijos. Es muy raro esto. Es una experiencia, sin duda alguna.

 

 

Son una banda bastante versátil: han tocado para miles de personas y también les queda cómodo tocar en lugares chicos. No cualquier banda lo logra…

Parodi: Se te hace complicado, sin lugar a dudas, pero le hace muy bien a una banda cada tanto bajar a ciertos lugares donde estás tocando con la gente delante tuyo y te toca los pies, te mueve los cables y ese tipo de cosas. No olvidarte nunca de dónde venís o todo lo que pasaste hasta llegar a determinado momento. Ahora hicimos los 2 Antel Arena, tocamos para 18.000 personas… a los 15 días tocamos en un lugar para 200. Por supuesto son shows que se agotan en 15 minutos. Es divino. Ves las caras de la gente, ellos lo ven de otra manera, te tienen al lado. Eso no se puede perder. Vos tenés que seguir perteneciéndole a esa gente. Que te pueda tener al lado, gritarte “tocá tal tema…”, hablar con vos… Ese tipo de cosas le hacen muy bien a una banda. Tenés la suerte de poder hacer todo a la vez, eso es lo gracioso.

La gira por los 30 años los reencontrará este 22 de agosto con el público argentino cuando pisen el escenario de La Trastienda. Será a la vez la ocasión ideal para el quinteto (conformado por Gustavo Parodi, Gabriel Peluffo, Pepe Rambao, Orlando Fernández y Federico Bianco) de afianzarse en este lado del Río de la Plata y poder mostrar adelantos de su nuevo material.

Vuelven a Buenos Aires (una plaza que han recorrido bastante), ¿cómo se llevan con Argentina?

Peluffo: Lo fundamental de este show en la Trastienda es, después de algunos intentos esporádicos en los cuales nos habíamos comprometido a volver con asiduidad y no lo logramos, un intento más. Elegimos particularmente La Trastienda, estamos haciendo una co-producción (pero ahora las cosas dependen un poco más de nosotros). Sabemos que tenemos público acá en Argentina, pero se nos está dificultando el hecho de juntarlo y poder tener esa asiduidad que nos gustaría. Esperamos que esta vez, ya que la banda ha puesto mucho y está muy comprometida con eso, sea el puntapié para lograr una continuidad. Poder encontrarnos con gente que nos permita lograr cierta continuidad de shows no solamente en Buenos Aires y provincia de Buenos Aires, sino más adentro de Argentina. Hay mucha gente que va a vernos a Uruguay, en el Antel Arena hubo gente de Argentina. En verano la gente nos va a ver, pero la idea es encontrarnos acá con ellos. Probablemente estemos desencontrados por los canales de comunicación y ver si a alguien se le ocurre a partir de esto empezar a encontrarnos más íntimamente.

Es el puntapié inicial…

Parodi: Exacto. Hemos venido y a los 20 días nos dicen “¿Cuándo vienen por Argentina?” El asunto es hacer mucho más fluido el tema de la comunicación. Tratar de conectar de una vez por todas de una manera real con ese público que sabés que tenés pero no sabés cómo concentrarlo. Bueno, éste es un intento más.

 

 

¿Qué particularidades va a tener este espectáculo?

Peluffo: La primer particularidad es el set que tenemos que armar, porque tenemos un límite de tiempo que quizás sea un poco más acotado a los shows que estamos acostumbrados a hacer y tenemos que ingeniárnosla. No podemos mostrar todo nuestro repertorio, vamos a mostrar sólo una parte. Vamos a tener que mordernos porque tenemos canciones nuevas y no sé si vamos a tocarlas. La clave está en el armado del repertorio. Me parece que va por ese lado. Es el gran desafío que tenemos. Hemos tenido varias experiencias en shows. Tuvimos los Antel Arena masivos donde hicimos un recorrido del repertorio y a los 15 días tocamos en un lugar muy chico de jam blues donde tocamos los temas que no tocamos en el repertorio de los 30 años. Tenemos para elegir y creo que ahí va a estar la clave: en una hora y media tener una buena representación de temas y dar un buen show, fundamental. Es un show distinto. Todos lo son, pero este particularmente va a ser bastante distinto.

Hay canciones listas para salir a la cancha, ¿hay nuevo disco proyectado?

Peluffo: Hay un adelanto que se llama “La primera vez” que está en las redes. Es el primer tema del disco. Ya estamos terminando los demás temas y entramos a grabar. Después del show en La Trastienda ya nos quedamos a grabar en El Abasto. Todas las ideas que tuvimos se están concretando y eso nos tiene muy contentos.

Para cerrar, además de la grabación del disco y del show en La Trastienda, ¿qué le espera a Buitres?

Peluffo: Tenemos una gira por los 30 años (este show en La Trastienda está metido en ella). Se va a tocar en Uruguay por fuera de Montevideo, en el festival de Cosquín. Probablemente vayamos a España, tenemos la posibilidad de hacer 4 fechas allá (es una gira que hemos hecho varias veces). Todavía lo estamos evaluando. Básicamente ahora se abre, con lo que pasó en los festejos de los 30 años y con la salida del disco, 2 años de mucha intensidad, de muchos shows. Y ojalá que acá haya varios.

Buitres se presentará el jueves 22 de agosto en La Trastienda (Balcarce 460, Ciudad Autónoma de Buenos Aires). Entradas a la venta por Tuentrada.com.

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