Valle Inquietante presenta “Las Montañas”, tercer adelanto de su segundo disco. Prisma dialogó con Fernando Liciotti sobre este material y el proceso creativo constante de una banda que combina el rock blues progresivo de los  ‘70 con con tintes psicodélicos y garageros de la actualidad.

  • Reportaje y texto: Julián Retamozo

La banda oriunda de Varela presenta en sociedad un nuevo adelanto de su segundo disco. En esta oportunidad se trata de “Las Montañas”, una balada disruptiva en comparación con los adelantos anteriores (“Viento sopla desde adentro” y “El ególatra”), pero que nos permite indagar un poco más sobre el concepto general del nuevo material.

Dialogamos con Fernando Liciotti, guitarrista y cantante, sobre el nuevo material de Valle Inquietante. Una banda en crecimiento, búsqueda y creatividad artística constantes.

Están presentando “Las montañas”, una canción disruptiva en relación a los otros 2 adelantos del segundo álbum, ¿cómo fue el trabajo para con este tema?

FL: Si la contamos conceptualmente, esta vendría a ser la tercer canción en el disco, y es la bisagra que baja la intensidad de las otras 2 canciones que sacamos anteriormente. Ésta es un poco más lenta, más calma si se quiere, con una poesía un poco más significativa desde mi punto de vista. Forma parte del concepto del disco en sí. La grabamos junto a las demás canciones que van a pertenecer al disco. Serán 5 y estamos viendo la posibilidad de lanzarlas como simples. 

 

 

Valle Inquietante recupera la tradición rockera argentina de los ‘60 y ‘70. Escuchando a la banda, se nota la influencia de bandas como Pescado Rabioso, hay mucho que remite a Luis Alberto Spinetta. ¿Cómo es el trabajo que realizan a la hora de encarar cada tema?

FL: Cuando la banda se concibió, la idea era justamente tener la impronta de lo que sería el rock de los años ‘70, tipo Pescado Rabioso, Manal, Vox Dei. Internacionalmente hablando, Led Zeppelin, Deep Purple, Black Sabbath… Con el tiempo fuimos dándole toques más actuales. Y hoy Valle tomó una personalidad que de alguna manera nos separa un poco de los estilos de aquella época. Ya estamos armando los temas del tercer disco que también se van a separar de lo que es el segundo y ya pensando en armar en un futuro cosas que tengan otro estilo. La idea de la banda es ésta: estar todo el tiempo en dinámica de crear otras cosas, otros estilos. Ir evolucionando si se quiere. 

Un detalle no menor en la obra de Valle Inquietante es la mixtura que se da entre la indagación musical constante y la impronta barrial surgida de la cotidianeidad de la banda creada en 2017 en la localidad bonaerense de Florencio Varela. De esta manera, la banda logra combinar acertadamente las vivencias del día a día con el rock y la psicodelia.

Yendo más hacia la personalidad de la banda, uno escucha las canciones de Valle y nota cierta picardía barrial bien del Conurbano. Eso también forma parte de la identidad…

FL: Sí, totalmente. Eso nos nació porque es nuestra realidad. Cuando empezamos a tocar nos dimos cuenta que nuestras letras, o nuestra poesía si se quiere, iba para ese lado porque era lo que vivíamos diariamente. Muchas de las cosas que decimos en nuestras canciones, como por ejemplo que “en el barrio se camina por la calle”, son cosas que nos ocurren diariamente porque en el barrio justamente las veredas son de barro o hay zanjas que ocupan un gran espacio. Y la gente va por la calle. Va a comprar el pan caminando por la calle. Es un poco lo que plasman nuestras letras, la realidad que vivimos diariamente: el viajar en bondi, volver tarde a casa porque justamente los medios de transporte son a veces un bardo. O que se suspendan los trenes… Es como el aprendizaje de barrio si se quiere.

 Volviendo a este último lanzamiento, mientras estaba leyendo la ficha técnica del tema hubo un detalle que me llamó la atención y es el tema de la grabación en cinta. Lo cual, le da un toque particular a la banda…

FL: Tuvimos la oportunidad de grabar en el estudio El Attic de Patricio Claypole. Él tiene toda la maquinaria de cinta analógica. Tuvimos la chance de tener su contacto, de poder comunicarnos con él y nos dio la posibilidad de grabar ahí. Y la verdad es que sí, se nota mucho en el sonido. En la calidez del audio sobretodo. Para nosotros fue un sueño poder grabar de esa manera. Grabamos las bases y las voces ahí y algunos detalles los grabamos por fuera. La verdad que es un lujo.

 

 

“Las montañas” forma parte del disco sucesor del primer LP de Valle Inquietante, llamado “Música horrible para gente joven”. Lanzado en 2019, este álbum cuenta con la partocularidad de haber sido enteramente grabado y producido por la banda en su sala/estudio, con técnicas artesanales que se utilizaban en las grabaciones de los años 60s.

En relación al primer disco y lo que fueron los primeros singles de la banda, ¿qué evolución notas en la banda con este segundo disco?

FL: En el primer disco la intención era mostrar la vida diaria de Valle. Mostrarse más barrial, más artesanal. Lo grabamos nosotros en la sala sin saber demasiado, viendo tutoriales. Aprendiendo así a ojo con muy pocas herramientas. La calidad que le pudimos dar es muy baja, la realidad es esa. La magia está hecha por Walter Balaszczuk, que hizo una masterización y una mezcla fantásticas y pudo lograr levantar de alguna manera la calidad del audio del disco. Ahí se nota justamente eso: la impronta artesanal. La batería, por ejemplo, la grabamos con 2 micrófonos: micrófono de bombo y micrófono de arriba. “Listo, no hay más vueltas” (risas) Como se hacía en los ‘60. Pero para el segundo disco pudimos tirarnos el piletazo y grabarlo en el estudio El Attic y la verdad que ahí ya hay otra impronta también en la composición. Es un disco que tiene más progresivo, más sinfónico. Es más conceptual. Habla de un concepto de algo que evoluciona, de una persona que está haciendo un recorrido de vida muy importante. El primer tema (que aún no salió) habla de la partida, el segundo tema habla de una fórmula que está buscando para volver a vivir su felicidad anterior. El tercer tema, “Las montañas”, habla de justamente una redención y perderse un poco en una bruma. Perderse para encontrarse. El cuarto tema “Viento sopla desde adentro”, es el caos y el aceptar que cayó la ficha de que uno no es el único en el mundo y que está ahí para crecer y aprender. El último tema, “El ególatra”, es justamente eso: despojarse del ego.

 

 

Valle Inquietante está compuesto por Fernando Liciotti (guitarra y voces), Damian «Tuta» Tustanoski (bajo y voces), Mariano Savid (batería) y Facundo Mansilla (teclado y voces). Actualmente, la banda fluctúa en la estética sonora y visual del rock blues progresivo de los años 70, combinada con tintes psicodélicos y garageros de la actualidad. 

Justamente, mientras escuchaba los 3 temas lanzados hasta el momento del segundo disco, me llamaba la atención la complejidad y la diversidad de paisajes de cada tema. Es un gran trabajo de composición…

FL: Son temas más complejos, eso es una realidad. A comparación del primer disco, el segundo tiene temas con una complejidad aún mayor porque buscamos eso: hacer un disco más progresivo, más difícil de tocar si se quiere. Veníamos de un disco más clásico, más “rocanrolero”. En este intentamos darle esa impronta un poco más compleja, una arquitectura que se adapte un poco más a lo que queríamos hacer, a esta música “difícil”. Y no solamente difícil por cómo se toca, sino también por la poesía que llevaba, por el concepto que teníamos de este segundo disco. Esto que mencionabas vos de paisajes, de viajes. Lo tuvimos muy en cuenta cuando lo compusimos. Y por lo que me decís, parece que se plasmó, asique buenísimo.

¿Qué es lo próximo que viene para Valle Inquietante?

FL: Ahora estamos pensando para qué lado agarrar. Obviamente con muchas ganas de seguir tocando en vivo, de seguir ensayando. Tenemos pensado seguir componiendo canciones nuevas. Ya tenemos pensada la tercer etapa de Valle con un concepto y con un estilo. Ya sabemos para qué lado va a ir. El tema de los shows en vivo y presentar la segunda etapa o segundo disco (llámenlo como quieran) está un poco parado porque la situación de pandemia nos dejó a todas las bandas sin espacios para poder organizar movidas que nos den de alguna manera la posibilidad de tocar y a su vez ganar algún sustento para poder bancar esas movidas. Hoy los shows están muy limitados, hay espacios muy limitados. Entonces, no podés meter cierta cantidad de personas por tema de protocolo y es un lío. Asique estamos pensando todavía la cuestión de las movidas y de los eventos, pero tenemos muy presente esta idea de hacer cosas nuevas todo el tiempo. Lo que en nosotros es muy normal, porque somos muy manijas (risas). Seguir componiendo y seguir sacando material.

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