• Reportajes: Ivana Nitti y Julián Retamozo
  • Texto: Ivana Nitti
  • Fotografía: Camila Peñalva, Ivana Nitti y Julián Retamozo
  • Edición de fotografía y voz en off: Camila Peñalva
  • Edición de audio y video: Julián Retamozo

 

Atleta, poeta, libre y soñador. Luchador y fiel a sus convicciones, así fue Miguel Benancio Sánchez. Un joven de 25 años al que la última dictadura cívico-militar, le robó la ilusión. Pero ahí está, desde Roma a Villa España, Miguel vive en cada carrera. Nos enseña y nos recuerda, sobre una historia que no desaparecerá jamás.

 

 

A 40 años de la detención y desaparición forzada de Miguel Sánchez, Prisma Contenidos elaboró un material especial que aborda la vida del deportista argentino, desde distintas aristas. Recordado en el seno de su familia por su hermana, Elvira Sánchez o por su compañero de militancia, Víctor Hugo “Beto” Díaz y re descubierto por quien fue el promotor de La Corsa di Miguel, el periodista italiano Valerio Piccioni. Matices de una misma historia sobre quien supo representar la bandera celeste y blanca en el resto del mundo.

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Quién fue Miguel

 

“Humilde, bonachón, simpático, alegre. Jugaba con mamá y con su perro, que se llamaba Adam. Cuando regresaba del trabajo en tren chiflaba y el perro se desesperaba para ir a esperarlo y agarraba a mi mami para que le abra la puerta. En el barrio le decían Miguelito, era amable con todos. Y en el Banco el Tucu o Corre caminos. Éramos muy compañeros, los dos solteros, me decía petisa o solterona. Siempre me traía regalos de donde iba a correr. Lo último me dejó en mi cama un perro caniche de juguete. Amaba la vida, el deporte y escribir poesías para las mujeres” (Elvira Sánchez, Hermana de Miguel Sánchez, Octubre 2018).

“Fue uno más de este pueblo argentino. Vino a buscar su vida a Buenos Aires. Eran de una familia muy humilde tucumana. Se interesó por ayudar a otros y militó más allá de su vocación personal que fue la de correr, la de ser deportista, la de escribir cada tanto en sus ratos libres. Tuvo una inquietud que fue la de ayudar a otros, y eso es lo que generó que fuera desaparecido. Esa solidaridad, esa vocación de creer y ayudar al otro, militando en una unidad básica y ayudando a los vecinos a hacer una vereda o a preparar a los chicos que les iba mal en la escuela. Después de eso el desapareció. Esas eran las cosas, las ideas que molestaban. Para nosotros Miguel es un emblema de la participación, de la vida sana, de ayudar a los otros” (Ana Paredes, integrante de la Asociación de la Carrera de Miguel, Octubre 2018).

 

 

Miguel Benancio Sánchez desapareció el 8 de enero de 1978, en su casa de Villa España. Nació en Tucumán y siendo el menor de diez hermanos, supo vencer los avatares de la vida para dedicarse a una de sus pasiones: el atletismo. Corrió en San Silvestre en Brasil, y también en Uruguay:

“A las 3 de la mañana golpeaban la puerta del pasillo preguntando por Miguel Ángel, mi hermana les decía que allí no vivía ningún Miguel Ángel, seguían golpeando hasta que abrieron la puerta y entraron 8 hombres con armas corriendo buscando a Miguel. Su perro los enfrentó y le pegaron hasta que se fue a su cucha. Entraron a la casa, vivíamos al fondo. Lo hicieron levantar. Le preguntaron por qué tenía la bandera y él les dijo porque era argentino. Revisaron biblioteca, tirando todo. Igual placar. No encontraron nada. Lo hicieron vestir con la ropa de gimnasia que él había traído. Se llevaron la bandera, agenda, reloj, acolchado. Y lo hicieron salir por el pasillo y no permitieron que mi madre le diera un beso porque ya regresaba” (Elvira Sánchez, Hermana de Miguel Sánchez, Octubre 2018).

 

 

Pero Miguel también tenía otras pasiones y virtudes: su escritura y solidaridad. Miguel era:

“un hombre como yo, como uno que ahora pasa por la calle, que tiene sueños, que tiene amigos, que tiene un diario donde anota cosas de su vida, que va a correr, que trabaja como bancario como empleado, que tiene algunas ideas políticas muy ingenuas a veces, que quiere mucho a su país, y espera la copa del mundo de 1978” (Valerio Piccioni, Periodista de la Gazzetta Dello Sport, Octubre 2018).

A Miguel le gustaba escribir, y por entonces escribió el poema “Para vos, atleta”. Se lo enseñó a un periodista de Sao Pablo en su viaje por la carrera de San Silvestre y, a la mañana siguiente, fue publicado por el periodista de la Gazzetta Deportiva de Sao Pablo:

“Escribía en el tren o colectivo si una mujer le gustó. Siempre poesías. No me enseñaba sus escritos. La poesía «Para vos atleta» la descubrí en el diario que trajo de Brasil porque allí la editó. No se llevaron el bolso porque lo dejó en casa de mi hermana que vivía al frente. Mi mami, él y yo vivíamos en la casita del fondo” (Elvira Sánchez, Octubre 2018).

 

 

La Corsa Di Miguel

 

“Esa manera de enfrentarse a esa gente le costó mucho. Pero Miguel fue secuestrado y sigue siendo desaparecido porque tenía el coraje de sus ideas y defender sus amistades” (Valerio Piccioni)

 

Fue un periodista, Valerio Piccioni de la Gazzetta Dello Sport, quien investigó y se conmovió con la vida de Miguel Sánchez. De Roma a Buenos Aires, Valerio se interesó por lo acontecido con el atleta argentino, y decidió emprender un camino que fue pionero en lo que después sería la Carrera de Miguel en Buenos Aires y en Villa España (por solo citar lugares de Argentina) en recuerdo y memoria del deportista desaparecido.

“Nace una tarde de frío y de lluvia por Buenos Aires el 15 de agosto. Yo me encontraba acá en mi primer viaje a la Argentina, para hablar en la Universidad de Córdoba sobre el tema de la globalización y el deporte. Terminada mi tarea en la Universidad, yo tenía que tomar el avión para ir a Buenos Aires y después volver a Roma. Pero hubo un atraso un problema con el avión y entonces nos quedamos con otro periodista francés en Buenos Aires, alquilamos un hotelito por una noche y empezamos a dar una vuelta por la calle Corrientes. Y salió como algo en el aire que uno siente que está pasando algo en su vida. Y me llamo mucho la atención calle Corrientes por todas las librerías, yo tengo una relación muy fuerte con los libros y entonces en una librería de calle Corrientes yo encontré un libro “El terror y la gloria, la historia del mundial ´78” pero vivida por las familias que tenían gente desaparecida. En aquel libro hubo una nota, pequeña, unas líneas, que hablaba sobre Miguel Sánchez. Hablaba esa nota del diario Clarín sobre un deportista federado, desaparecido y que publicó en el diario de Sao Pablo de Brasil, antes de correr su penúltima carrera, publicó el poema “Para vos, atleta”.

Y bueno, volví a Roma con muchos pensamientos sobre esa historia. En aquel entonces yo también era un maratonista amateur, tenía un poco las mismas pasiones que Miguel: correr y escribir. Yo más cuentos y el más poemas. Y cuando volví a Argentina después de seis meses, empecé a buscar su número de teléfono de su familia en la guía telefónica, hablé con la hermana Elvira y arreglamos una cita en Tucumán. Era enero de 1999. Llego a Tucumán y hablo con ella y con otra hermana, fue un día muy caluroso y hablamos mucho, inicialmente con un poco de prudencia pero salió un poco la historia de ese chico y de su sencillez.

Después empezaron muchas cosas. Pero la cosa más importante que yo creo de esa historia que ahora ya cumplió la mayoría de edad fue las personas y los lugares. Quiero decir que es muy lindo cuando te das cuenta que Miguel nos dio muchas cosas y también la posibilidad de conocer a las personas en distintas partes del mundo.

La verdad que Miguel me presentó su ciudad, y me siento muy lleno y seguramente a veces yo pienso seria lindo escribir un libro, pero el libro tiene la necesidad de una estructura de un hilo en común, pero Buenos Aires, Miguel y las cosas que pasaron me da a algo diferente, a un lindo desorden”. (Valerio Piccioni, Octubre 2018).

 

 

La primera Corsa Di Miguel se disputó en Roma en el 2000. En aquella primera carrera, los atletas llevaban una remera con la insignia de un pasaje del poema de Miguel “Para vos, atleta”:

“El mensaje de Miguel mezclaba la soledad y las ganas de conocer a las personas. El corredor tiene esa doble identidad. Cuando uno corre busca un poco de soledad pero también cuando uno corre se adueña de un lenguaje de un dialogo de una posibilidad de conectarte con otras personas, de mirarla. Yo creo que paso algo de similar a Miguel.“

¿Usted cree que logró a través de la Corsa Di Miguel visibilizar la historia de Miguel Sánchez?

Yo agradezco a todas las personas que hablan bien de la carrera de Miguel y de mí, pero la carrera de Miguel es algo más grande. Hace poco encontré un amigo que me dio la remera de la Carrera de Miguel en Cali, en Colombia. Yo creo que en cada tragedia tú puedes contarla de una manera histórica escolástica como un libro, pero también la puedes contar con la vida de las personas. Cada historia tiene su identidad. Yo creo que en este mundo no es pensar el pasado, esto es presente. Esa idea que Miguel tenia de la vida, del deporte, sin muros, sin barreras, donde uno hablaba el idioma del deporte, es una idea que el mundo está viviendo con muchas dificultades.

Entonces Miguel nos enseña de tener siempre confianza a pesar de lo que pasó.

La Corsa Di Miguel cumplió su mayoría de edad, ¿qué aprendizaje le deja?

Pasó un poco de historia italiana y argentina. Al principio contestaba muy poca gente cuando yo quería indagar sobre lo que había pasado. En el ´98, ´99, la Argentina tenía un poco de miedo de enfrentarse a ese pasado. Pero después cambio todo porque empezaron otros gobiernos y hubo reconocimiento de esa tragedia. Y ahora hay un poco esa idea de cortar con el pasado, no entendiendo que el pasado está presente. ¿Cómo puede ser pasado la historia de hombres como Miguel que buscan esa idea de mundo tan mezclado tan vario? Cambiaron muchas cosas, recuerdo los primeros años que el elemento de papel era muy presente, volantes, notas sobre diarios de papel. Ahora, la Carrera de Miguel en Roma es un evento muy digital donde hay presencia en las redes sociales, cosas que se viven en este mundo.

Miguel compartía algunas de las pasiones que usted menciona, por ejemplo, sobre la escritura y el atletismo. ¿Cómo imagina que era él?

Para mi él tenía dos migueles adentro. Tenía un Miguel muy tímido, muy íntimo. Y por otro lado era un muchacho que le gustaba charlar, le gustaba salir a la noche, le gustaban las mujeres, le gustaba comer mucho. Pero yo creo que la cosa más linda era su curiosidad. Siempre tengo la idea de un chico que pasa una cosa por la calle y se pone a participar, a preguntar.

El formó parte de la Juventud Peronista…

En los primeros años la familia creía en un error, porque cuando llegaron a la casa de calle San Martin en Villa España, los militares buscaban otro Miguel Ángel. Pero no es así.

Miguel, yo estudié bastante su historia, tenía una militancia liviana en términos de organización. El frecuentaba la unidad peronista pero no tenía un papel de primer nivel. Pero él tenía una característica. Después del golpe, donde toda la actividad política era más difícil, él no se esconde. Nosotros hemos hablado por ejemplo con la mujer de un dirigente sindical que desapareció la misma noche. Miguel iba a su casa que era una casa quemada porque los militares sabían lo que pasaba. Y fue con su amigo y quemaron un montón de materiales unos días antes de desaparecer. U otra cosa cuando encuentra a su amigo Beto Díaz que estuvo detenido un tiempo y él no tiene problemas en abrazarlo a pesar de saber cómo están las cosas. Entonces yo creo que Miguel tenía esas amistades y en aquel tiempo tener amistades y respetarlas era un acto de coraje.

Creo que por esto es que desapareció. Y después tenemos un testigo de lo que paso en el centro de detención que cuenta algo que es muy fuerte, que Miguel llega y habla. Toda la gente que llegaba se encerraba en un silencio porque pensaba que cada palabra podía ser un problema, pero Miguel no encuentra la fuerza de no hablar. A pesar de sus ojos vendados dice ¿qué estás haciendo? Yo representé a la Argentina en Brasil, en Uruguay, ¿cómo es posible?

Esa manera de enfrentarse a esa gente le costó mucho. Pero Miguel fue secuestrado y sigue siendo desaparecido porque tenía el coraje de sus ideas y defender sus amistades.

 

 

Miguel competía para el club Independiente, sin embargo nunca se pronunciaron ni a favor ni en contra de su caso, ¿Por qué cree que hubo ese silencio de parte de la dirigencia del club de Avellaneda?

Si, la verdad que no sé. Para empezar fue difícil para muchas personas que tienes que enfrentarte con la culpa. Y después hay otra postura hacia aquellos años en pensar que ya pasó. Por eso cuando te enfrentas a una tragedia no es fácil profundizarla. A veces cuando hablo de esto en las escuelas me pasa que alguien, algunas personas se ponen una sonrisa en la cara, pero yo le digo a esos chicos, yo entendí por qué. Porque lo que pasó es tan terrible, pensar que uno se levanta a la mañana y le dicen tu hijo, tu hermano no está, se fue. Es una cosa demasiado fuerte. Entonces uno se escapa, se va, busca una sonrisa que es una manera de protegerte.

¿Cómo ve la política vinculada con los Derechos Humanos en la actualidad?

El momento políticamente es difícil en todo el mundo. Esa idea loca de que todos los problemas surgen de los inmigrantes. Pero para volver al tema y no escapar a la pregunta, yo te voy a decir una cosa. Yo encontré a Mauricio Macri cuando era Intendente de Buenos Aires y se fue a Roma a un encuentro de trabajo y le entregué la bolsita de la Carrera de Miguel y él se puso muy frío. No me trató mal, hablamos también, pero yo creo que no tiene esa sensibilidad. Hablando de la actitud humana y no de la postura política. Entonces antes de la postura política hay un problema de sensibilidad.

¿Qué decir de la Argentina de hoy? Yo no puedo escribir una opinión muy orgánica porque sería banal. Yo creo que el Kirchnerismo hizo algunos errores, también puede ser la elección del candidato. Pero te voy a decir una cosa: acá los jóvenes son una esperanza. No todo es Facebook, hay también una calle de una Universidad, hay una pintada en la pared de una Universidad, hay chicas valientes como las del colegio de Buenos Aires que se atreven a decir cosas.

La política no es solo cambiar el mundo, pero también cambiar o salvar una pequeña cosa, una asociación, un lugar donde la gente se ve. Cambiar un gramo, un centímetro de la vida de las personas. Eso es la diferencia.

Le ha dejado muchas gratificaciones la carrera de Miguel a nivel personal…

Sí, yo agradezco lo bien que hablan de mí. Pero las cosas más lindas son las que pasan alrededor, por ejemplo la posibilidad de descubrir cosas nuevas, personas nuevas. Es importante que corran 10 mil personas el 20 de enero de 2019 en Roma, pero lo importante es encontrarte con otras personas.

 

La Carrera de Miguel

 

“Todas las mañanas entrenaba. Corría desde casa hasta Ranelagh o cuando regresaba del trabajo bajaba en Villa Domínico a entrenar. Allí conoció a su maestro como él lo llamaba. Osvaldo Suárez, que ya nos dejó” (Elvira Sánchez)

 

 

 

Desde Roma a Villa España, el pasado 20 de octubre la largada se disputó en la ciudad que lo vio formarse como deportista y entrenarse cada día para lograr su mayor rendimiento deportivo. Pero también, fue el lugar en donde Miguel desarrolló su sensibilidad más humilde y sentida por su vecindad:

“Miguel luchaba por la Justicia Social. Se reunía con el grupo y mi querido Beto Díaz, los sábados. Si viviera hoy él estaría militando con los peronistas y sufriría por la situación del país. Amaba a los jubilados. Era amigo de los ancianos del barrio, de las familias, de los jóvenes, de los guardas del tren. Cosechó muchos amigos. A todos los jóvenes los quería hacer correr o que jueguen al fútbol. Así era mi hermano” (Elvira Sánchez)

La carrera corrió por su 14° edición, organizada por la Asociación de la Carrera de Miguel formada por Ana Paredes y por la Escuela de Educación Secundaria Nº 7 “Ernesto Che Guevara”.

¿Cómo llegaron a conocer la historia de Miguel?

Nuestra escuela está a 8 cuadras de la casa de Miguel. Nosotros nos enteramos de la historia de Miguel a través de un periodista, Valerio Piccioni. Ahí dijimos cómo en Roma están haciendo un homenaje y nosotros que somos de acá no lo estamos haciendo. En aquel entonces el director de la escuela se entera y se pregunta qué hacemos con esto. En primera medida pedir que se cambie el nombre de esta calle la 149 A se le pone el nombre de Miguel Benancio Sánchez. En 2001 se empieza a hacer la carrera pero en Buenos Aires, y en el 2005 decidimos hacer nuestra primera carrera que en Tucumán también se hizo ese mismo año, lugar donde nació Miguel.

¿Qué recuerdos tienen de aquella primera carrera?

Para nosotros era un gran desafío. Nos ayudaron mucho los profesores de gimnasia. Cada año nos planteamos un tema para trabajar. La carrera de Miguel es una excusa. Estamos trabajando por la memoria, por los derechos humanos, por todas las causas que necesitan ser defendidas. Temas del pasado y del presente.

 

 

La carrera de Miguel es una carrera de valores en la que se reflexiona y se visibiliza un pasado que merece no ser olvidado: “Es una carrera solidaria, en la que todos nos hermanamos para trabajar en algo que es una colaboración comunitaria. Aquí nadie recibe nada. Es una carrera con todas las ideologías, gente que adhiere a distintas causas pero que trabaja en conjunto. El fin último de trabajar por la memoria, la verdad, la justicia y los derechos humanos” (Ana Paredes)

 

Las voces de la Carrera

 

“Esta es mi misión en la vida. Ejercer la memoria que es la luz que nos ilumina a todos” (Elvira Sánchez)

 

Durante la jornada del sábado 20 de octubre, sobre el escenario montado por la Escuela de Educación Secundaria Nº 7 “Ernesto Che Guevara” ) se dispuso un discurso alusivo para luego dar comienzo a la caminata hacia la casa de Miguel en primer lugar, y luego las pruebas de 4 km y 7,5 km.

Entre las personas allí presentes, Prisma Contenidos dialogó con algunos de los participantes:

 

Víctor Hugo “Beto” Díaz

“Cuando venía para acá, yo vivo en La Plata, venia pensando y hablando con Miguel, diciéndole bueno, volvimos a correr. Vamos a correr con vos como todos los años.

Esto es nuestro lugar, un lugar muy sentido. Aquí quedaron nuestros recuerdos. Miguel, ahora estamos de vuelta, juntos.”

¿Qué los unía con Miguel?

Había un compañerismo. Esa solidaridad, esa fraternidad, ese abrazo. El afecto. Eso es lo que nos abrazaba.

 

Federico Carolini, estudiante y participante de la carrera

“Está bueno reflexionar porque nos podría haber pasado a nosotros y Miguel fue una persona que corrió mucho y desapareció. Está bueno representarlo todos los que corremos”.

 

Claudio Morresi, ex Secretario de Deportes de la Nación (2004-2014)

“Me pone muy feliz ver a tantos jóvenes que vienen sosteniendo lo que es la memoria, la verdad y la justicia. Esta carrera tiene un contenido aeróbico, de actividad física y de mejora de la salud a través del deporte, pero también recuerda a un compañero, a un maratonista muy comprometido con su tiempo que buscaba un mundo más justo y que junto a otros 30 mil ha desaparecido”.

 

Comisión Gremial Interna del Banco Provincia de Buenos Aires

“Lo vivimos con alegría porque estamos transitando esta etapa con resistencia, y este es un momento para reflexionar la situación económica del país y por eso apostamos a que esto se siga haciendo”.

 

Elvira Sánchez

“Es emocionante, cada carrera es reivindicar el nombre de Miguel y los 30 mil desaparecidos siempre presentes. Y es una emoción ver tantos jóvenes, porque la juventud es lo que te da esperanza, porque están participando y cada vez más, para llegar a la verdad.

A Miguel lo recuerdo de todas maneras. Alegre, taciturno, preocupado, divertido. Pienso que estará alegre y participando al lado de cada atleta que corre y si lo tuviera aquí le diría que estoy orgullosa de él, porque resistió hasta el último momento en donde estuvo, en el Vesubio, encapuchado y golpeado y gritando soy Miguel Sánchez, soy atleta, vendgo de correr y representar a la argentina”.

 

Marcos y Mario Godoy, primer puesto Carrera de Miguel 2018

“El mensaje es que nunca más. Esto no lo queremos en nuestro país ni en ningún lado. Todo esto nos deja una gran enseñanza”. (Marcos Godoy)

“Soy atleta de Berazategui y represento a mi ciudad. A Miguel lo llevamos en el corazón. Siempre venimos a representarlo en su memoria, sabiendo que él no está presente pero sí su espíritu.

En esta carrera se lleva una pulsación diferente, porque correr en memoria de un atleta que lo hicieron desaparecer, que hoy no tiene la oportunidad que nosotros tenemos de competir y de hacer lo que nos gusta, a él no se lo permitieron. No lo dejaron crecer. Mientras esté en nuestra memoria, él va a estar vivo”. (Mario Godoy)

 

Ignacio Levy, director de La Garganta Poderosa

“Para nosotros la carrera es siempre una misma carrera que empezó hace 40 años y hace casi 20 se empezó a traducir en este encuentro que va mucho más allá del atletismo y de lo deportivo.

A Miguel no lo desaparecieron por correr rápido ni por ganar una carrera de San Silvestre. Lo desaparecieron por su compromiso social, por su militancia, por su idea de poder construir un mundo con otras oportunidades.

Pienso que Miguel sigue corriendo. La muerte es mentira para los que luchan y que la posibilidad de construir una vida mejor un presente mejor pensando en un futuro mejor, nos trasciende. Esto está minado de jóvenes, del compromiso desde la escuela Che Guevara.

Cuando aún parece que está todo tan difícil para lucharla, tan difícil como para desaparecer corriendo, aún así vale la pena”.

 

Miguel vive en cada carrera

 

“Miguel te seguimos recordando como desde el primer día. Hoy has trascendido Villa España, la carrera se corre en todas partes del mundo. Así que Miguel, seguimos corriendo con vos” (Beto Díaz)

 

 

Para quienes lo conocieron, para quienes no. Para aquel que supo de él a partir de hoy. Para todos y todas a quienes nos conmueve o conmovió su historia, la historia de Miguel, que también es un poco la historia de un pasado oscuro de nuestro país. Para todos, sigamos corriendo siempre con Miguel.

En esta charla se habló mucho de amistad y seguramente usted, a pesar de no haberlo conocido físicamente, lo considera un amigo. ¿Qué le diría si lo tuviera frente suyo?

“Llévame por Buenos Aires, demos una vuelta y enséñame el secreto de tu ciudad y llévame en las esquinas de los barrios, cuéntame lo que tiene de hermoso y misterioso esa ciudad y enséñame siempre a querer la vida en tu manera, ocupándome de los otros y no solo de mí y de mi familia. Y eso no se podría hacer corriendo porque él era un buen corredor y yo un amateur. Pero hay un lugar que yo vi hace tanto y me imagino a Miguel con el frio de las 6 de la mañana en la cancha de golf de Ranelagh y yo me imagino a Miguel que empieza su entrenamiento con mucha energía y muchos pensamientos. También me lo imagino cuando vuelve del curso para llegar a ser profesor de educación física….” (Valerio Piccioni)

 

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Agradecimientos

 

Nuestro especial agradecimiento al periodista Valerio Piccioni, por su sencillez y cálido recibimiento durante su estadía en Buenos Aires.

A Beto Diaz, por sus relatos llenos de valentía y amistad

A Elvira, por contarnos quién fue Miguel.

A la Asociación de la Carrera de Miguel, por abrirnos las puertas y colaborar con esta investigación.

“Encapuchado y gritando soy Miguel Sánchez, soy atleta, vengo de correr y de representar a la Argentina”