La banda liderada por Ariel Minimal regresa este 28 de abril al escenario de San Telmo tras 12 años para continuar presentando “Acariciar el fuego”, su último álbum.
- Reportaje y texto: Julián Retamozo
- Fotografía: Agustín Duserre
Tras el lanzamiento de su vigésimo álbum y con más de treinta años de carrera, Pez se prepara para el show del próximo 28 de abril, donde regresará a las tablas de La Trastienda para continuar presentando “Acariciar el fuego”.
Compuesto en la sala de la banda ubicada en el barrio de Flores durante la pandemia en 2020, “Acariciar el fuego” constituye un mapa del contexto actual, crudo y que entrelaza sonoridades, texturas, y armonías que deben escucharse poniendo atención a los detalles.
Prisma dialogó con Ariel Minimal sobre el disco, pasado, presente y futuro de una banda que siempre tiene algo para dar.
Al escuchar “Acariciar el fuego” se percibe una crudeza muy de este contexto, ¿cómo fue el trabajo de composición del disco?
AM: Por un lado fue como el trabajo que venimos haciendo hace casi 30 años: estar todo el tiempo sobre la música. Todo el tiempo tocando instrumentos, en estado de composición constante. A la vez, eso ocurrió durante la primer parte de la pandemia en Buenos Aires. Esos primeros meses donde realmente estábamos todos encerrados cual eternautas. Eso seguro tuvo incidencia en las letras del disco. Más que nada con el hecho de extrañar cosas, de darte cuenta que disfrutabas hacer o que te gustaban y que ya no tuviste oportunidad de hacerlas. A raíz de eso, surgió una cuestión medio nostálgica, medio tanguera.
Esa crudeza también se nota en la instrumentación, en la forma de tocar las canciones. Se ve una cuestión muy personal…
AM: Sí, pero no más personal que en otros discos de Pez. Siendo yo el principal compositor de la banda, siempre están teñidos de mi experiencia. De lo que me está pasando, de lo que pienso y lo que siento. Es un disco crudo porque es un disco en formato trío. Pez ha sabido configurarse en diferentes modos: como cuarteto, como quinteto. En este momento estamos atravesando un momento de trío. Hay muy pocas sobregrabaciones de guitarra, entonces es un disco crudo, los arreglos son en su mínima expresión.
El próximo 28 de abril se presentarán en La Trastienda, ¿cómo se vienen preparando para esa fecha?
AM: Estamos contentos de volver a tocar en La Trastienda. Es un escenario que nos gusta muchísimo, por cómo suena, la altura del escenario y por la historia que tenemos en ese lugar. Nosotros tocábamos bastante en La Trastienda y ahora volvemos luego de 2 o 3 años. No deja de ser un retorno para nosotros. Estamos muy contentos de volver a esa sala donde existe una acústica particular y se ve bien y se escucha bien de todos lados. Obviamente vamos a presentar canciones de “Acariciar el fuego”, pero también vamos a tocar canciones de todas las épocas. No va a ser estrictamente una presentación del disco nuevo, eso ya lo hicimos. Ahora estamos en otro momento, el de incorporar las canciones del disco nuevo al resto del repertorio y tratar de lograr un todo uniforme.
Pez lleva editados 20 álbumes, todos a través de su propio sello discográfico, independiente y auto gestionado: Azione Artigianale. Desde sus comienzos hasta el día de hoy el grupo integrado por Ariel Minimal, Fósforo García y Franco Salvador ha sabido ganar el respeto de la crítica, el público y sus pares, posicionándolo como uno de los más prestigiosos de argentina, y ese respeto fue ganado tocando su música (que puede considerarse de modo amplio como rock aun escapando de clasificaciones y estilos) en distintos estudios de grabación e innumerables escenarios.
Pez es un proyecto que lleva ya más de 30 años, ¿como notas la evolución de la banda a lo largo de todo este tiempo?
AM: No puedo disociarlo de lo que es mi vida. Es una vida. A la banda y a la música le pasan cosas, como a cualquier persona. Conocés gente, te casas, tenes hijos, te mudás. Hoy tenés un trabajo, mañana no lo tenés. Experiencias… la vida. Todo eso también le pasa a una banda: gente que viene, que se va, te va bien, te va mal. Grabás un disco, grabás otro, uno te gusta más que otro… Millones de cosas. Y en una banda tan longeva como la nuestra la evolución es natural. No sé si es evolución o involución, si estamos en una línea recta o es un vericueto (risas).
Además, son una banda independiente…
AM: En realidad, lo importante es la música. Debería serlo. No debería importar tanto si pagó por eso un novio millonario, si fueron los fans o si soy heredero de una fortuna europea (risas). Si la canción está buena, lo que debería importar es eso. A la vez es muy tortuoso y de impedir situaciones. No podés sacar los discos que querés ni sacar las cosas que querés porque sos independiente y no tenés un mango. Entonces, se puede romantizar la independencia, pero también tiene su costado garrón. Lo importante para nosotros siempre va a ser la canción.
Pez ha llevado su siempre emocionante show a las provincias de Argentina, Brasil, Uruguay y Chile; también ha sido invitado a los festivales más importantes (Lollapalooza, Cosquin Rock, etc.). En 2015 recibieron el Premio Konex como una de las cinco mejores bandas de rock de la última década.
A lo largo de estos 20 discos han logrado un estilo inclasificable, porque hay mucha variedad entre un disco y otro…
AM: Eso fue algo que fuimos buscando. Primero pasó que fuimos cambiando las formaciones de la banda, entonces la sonoridad iba cambiando por más que fuéramos trío en los primeros momentos. Al cambiar los músicos, ya cambiaba la sonoridad y la personalidad de la banda. Y después buscamos ir hacia diferentes, no sé si estilos, pero son diferentes sonidos, instrumentos, fuimos moviéndonos. Pasamos de sonar como un trío medio grunge a incorporar una flauta y un piano. Ya buscamos otras cosas, guitarras más limpias. Siempre estamos yendo y viniendo a cualquier lado a nivel estilístico. Que los discos se diferencien entre sí fue algo buscado. pero después de tantos discos ya no busco nada. Sólo busco canciones que me emocionen, que me den ganas de tocarlas, grabarlas… Ya no tenemos tanto el diseño de una carrera como en una época, como por ejemplo, decir “el próximo disco tiene que ser medio folkie, con coritos, como si hubiera sido grabado en el campo al atardecer”. Y otro disco tenía que ser completamente orfebre, se iba a llamar “Angular” en alguna época. Tenía que ser rebuscado, retorcido, con muchas partes instrumentales y opresivo y violento, como si estuviera en la gran ciudad. Eran diseños que buscábamos y tratábamos de armar. Y después de tanto tiempo haciendo esas cosas, ya no hacemos nada de eso y solamente tratamos de agrupar canciones que nos gusten.
Lo que da el paso del tiempo también es una banda muy afiatada…
AM: Vos imaginate que tenés un equipo de papi fútbol que juega todos los miércoles durante 30 años. Ellos van a saber perfectamente cómo jugar, adónde pasar la pelota. Van a jugar sin correr. Van a hacer correr a los demás y van a ganar 10 a 0 (risas). No te digo que nosotros vamos a ganar 10 a 0, pero ya sabemos cómo jugar juntos. Tocamos hace 30 años. Este trío en particular con Franco y Fósforo viene tocando hace 28 años. Ya sabemos cómo sonar juntos. En inglés tocar se conjuga igual que jugar, “play”. Bueno, nosotros jugamos juntos hace 30 años. Nos conocemos, sabemos dónde va a ir el otro, qué nos sirve más, qué nos sirve menos. La experiencia empieza a tallar y entra a tomar importancia con el transcurso del tiempo.
¿Qué es lo próximo que se viene para la banda, además del show en La Trastienda?
AM: En abril vamos a hacer 2 shows en Mendoza y uno en San Juan. Volvemos para tocar en La Trastienda y en mayo la idea es ir para Rosario y Córdoba. Y viajar para donde nos lleve la gente. Ahí iremos a tocar. Y, como siempre, habrá algún nuevo disco de Pez quizás con una formación ampliada. Volver a ser un cuarteto, no sé si con un tecladista o con otra guitarra, pero quizás con un instrumento más para tener más posibilidades de sonido a la hora de tocar en vivo.
Pez se presentará el jueves 28 de abril a las 21 hs en La Trastienda (Balcarce 460, CABA). Entradas a la venta en Tuentrada.com Dos horas antes de cada show se habilitará la boletería con el fin de vender tickets de forma presencial.
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